TODO ESTA CONECTADO
Queridos amigos,
Yo soy María, madre de Jeshua. Les saludo a todos en amor y
parentesco. Somos de una misma familia, conectados a través del corazón y nunca
realmente separados unos de otros. Sólo en la ilusión de la realidad material
nos parece aparte y separado, pero en realidad todo está conectado. Las almas
no pueden separarse, sólo los cuerpos pueden ser. Los cuerpos están ligados al
tiempo y al espacio, pero las almas no están atadas. Las almas están
continuamente conectadas entre sí y en un proceso de intercambio energético,
aunque esto no siempre es perceptible para su conciencia cotidiana.
¿Por qué digo esto ahora? Porque quiero hacerte consciente de la
red de energías en la que cada uno de vosotros se encuentra en la vida
cotidiana. Tú eres el centro de una red, de un campo de energías que está
compuesto, sobre todo, de energías del alma: las almas de aquellas personas a
tu alrededor a quienes amas. Pero también hay un círculo más amplio de almas
con las que están conectados, no todos los cuales están aquí en la Tierra, pero
que todavía pertenecen a ustedes de alguna manera. Y también hay almas que te
esperan, a quienes todavía no conoces, pero que quieren ser tocados por tu luz
y tu conciencia.
Cada uno de ustedes está llamado a traer conciencia a la Tierra
en este tiempo de cambio. Y además de enfrentar tu propio dolor interno y tomar
conciencia de tu propia gran fortaleza, también es parte de tu camino para
compartir tus percepciones y tu conciencia del corazón con aquellos que te
rodean. Hacer esto también te trae la curación interior, una tarea que no está
separada de la otra.
Les pido ahora que estén muy quietos dentro y respiren
suavemente en su abdomen. Simplemente relájate y deja que las energías de
estrés y de bullicio te arrastren a través de la luz que irradio hacia ti.
Siente la luz que te rodea como una ducha y déjala quitarte el estrés, la
ansiedad y la actividad para que te tranquilices y empieces a sentirte en esa
red, ese campo de energías, a través del cual estás conectado.
Deje que su conciencia descienda en el área de su abdomen, en su
pelvis, y sentir cómo hay un centro de conciencia allí que está muy bien
fundamentado y tranquilo, y no piense tanto, sino que experimente y sepa.
Descender allí y mirar alrededor con los ojos frescos de ese
centro en su cuerpo, y sienta si usted experimenta la presión en alguna parte,
quizás del mundo externo hacia su cuerpo. Cuando digo tu cuerpo, me refiero
especialmente al campo energético del cuerpo que eres, a tu aura. Sentido en su
ser donde hay malestar o discordia, pero permanezca en su abdomen. No pienses
en lo que está pasando en tu ser, solo obsérvalo, y simplemente imagina que una
lluvia de luz fluye sobre ti y lava la presión o el estrés que hay.
Luego vuelve al centro de tu abdomen e imagina que estás en una
red de energías, que eres un eslabón en esa red. Mire a su alrededor para ver
las caras de las personas con las que está estrechamente vinculado. Basta con
mirar con neutralidad a quien aparece allí. Tome una persona que se destaca por
usted en este momento y, puramente desde su abdomen, mira el intercambio
energético entre ambos. Vea si hay un equilibrio entre dar y recibir; Si se siente
bien para ambos, o si falta algo.
En el nivel del abdomen, hay un intercambio fundamental con el
otro, aunque a menudo hay una corriente subterránea que no se expresa
completamente en palabras. Tomen conciencia de ese flujo, que es muy
fundamental en todas sus relaciones. ¿Te sientes a gusto allí, te sientes
visto? Si lo es, entonces es bueno. Pero si no se siente cómodo, si hay un vago
sentimiento de descontento o si no está seguro, observe ese descontento con
mucho cuidado, porque ese es el nivel que contiene la información esencial que
necesita.
Se pretende que cada uno de ustedes traiga su alma hasta el
nivel del abdomen, hasta el nivel terrenal, para que pueda manifestarse allí.
También, en este nivel, el alma te habla. Si sientes tus relaciones lo suficiente
en este nivel, tu luz se extenderá al mundo porque tiene bases en tus emociones
terrenales, en tu humanidad.
Ahora muévase hacia arriba a su corazón y tome conciencia de la
amplitud de su corazón. Desde la perspectiva de su corazón, eche otra mirada a
la relación que es el foco de su atención y siente la conexión entre usted y el
otro, o la posible falta de la misma. El corazón es más espacioso que el
abdomen, a menudo puede ver las cosas desde un punto de vista diferente porque
está conectado a su alma. Pero el corazón sabe que una buena conexión también
debe sentirse a la altura del abdomen y que debe haber, a nivel humano, un
equilibrio entre dar y recibir.
Ahora suelta esta relación específica y siéntete como parte de
una red, un campo de relaciones. Siente cuánta luz quiere fluir hacia usted
desde ese campo; Todo tipo de inteligencias, de almas vivientes, están
conectadas contigo. Hay aquellos que están menos ligados al tiempo y al espacio
y que tienen una perspectiva más amplia que ustedes, porque están libres de la
esclavitud a la Tierra. Sientan en este momento su luz y ayuda, y sientan cómo
quieren apoyarlos y alentarlos en su trabajo en la Tierra. Crean mucha alegría
y luz dentro de ti, así que recibe y sienten apoyo.
Estás haciendo el trabajo de conciencia, que es más importante
de lo que piensas. Es un trabajo que tiene gran capacidad y alcance, y no es
sólo para usted, personalmente. Las almas que te hacen amistad desde el otro
lado ofrecen su cooperación para apoyarte en ese trabajo, así que recibe su
amor. Deja que tu aura se llene de la luz de ese otro mundo que conoces muy
bien, un mundo de ligereza, libertad y comodidad. Deje que fluya a través de
todas las células del cuerpo, desde la corona hasta los pies.
Te agradezco tu trabajo interior y te saludo con Alegría y gozo.
INGLÉS
Pamela channels Mary
Dear friends,
I am Mary, mother of Jeshua. I greet you all in love and
kinship. We are of one and the same family, connected through the heart and
never really separated from one another. Only in the illusion of material
reality do we seem apart and separated, but in reality everything is connected.
Souls cannot be separated, only bodies can be. Bodies are bound to time and
space, but souls are not bound. Souls are continually in connection with one
another and in a process of energetic exchange, even though this is not always
perceptible to your everyday consciousness.
Why do I say this now? Because I want to make you aware of the
network of energies in which each of you find yourselves during everyday life.
You are the center of a web, of a field of energies that is comprised, most of
all, of soul energies: the souls of those people around you whom you love. But
there is also a wider circle of souls with whom you are connected, not all of
whom are here on Earth, but who still belong to you in some manner. And there
are also souls who are waiting for you, whom you still do not know, but who
want to be touched by your light and your consciousness.
Each of you is called to bring consciousness to Earth in this
time of change. And in addition to confronting your own inner pain and becoming
aware of your own great strength, it is also part of your path to share your
insights and your heart-consciousness with those around you. Doing this also
brings you inner healing, the one task not being separate from the other.
I ask you now to be very still inside and to breathe gently into
your abdomen. Just relax and allow the energies of stress and of hustle and
bustle to wash off you through the light that I radiate toward you. Feel the
light around you like a shower and let it take away the stress, anxiety, and
busyness so you become quiet inside and begin to feel where you stand in that
network, that field of energies, through which you are connected.
Let your consciousness descend into the area of your abdomen,
into your pelvis, and feel how there is a center of awareness there that is
very well grounded and calm, and does not think so much, but experiences
and knows. Descend there and look around with fresh eyes from that center
in your body, and sense if you experience pressure somewhere, maybe from the
external world toward your body. When I say your body, I especially mean the
body's energy field that you are, your aura. Sense in your being where there is
unrest or discord, but stay in your abdomen. Do not think about what is going on
in your being, just observe it, and simply imagine that a shower of light flows
over you and washes away the pressure or stress that is there.
Then come back to the center of your abdomen and imagine that
you are in a network of energies, that you are one link in that network. Look
around you to see the faces of people with whom you are closely linked. Just
look quite neutrally at who appears there. Take one person who stands out for
you at the moment and, purely from your abdomen, look at the energetic exchange
between you both. See if there is a balance between giving and receiving; if it
feels right for both of you, or if there is something missing.
At the level of the abdomen, there is a fundamental exchange
with the other, although there is often an undercurrent that is not expressed
entirely in words. Become aware of that flow, which is very fundamental in all
your relationships. Do you feel at ease there, do you feel seen? If you are,
then it is good. But If you do not feel at ease, if there is a vague feeling of
discontent or you are not sure, then look at that discontent very carefully,
because that is the level which contains the essential information you need.
It is intended that each of you brings his or her soul all the
way down to the level of the abdomen, to the earthly level, so it can manifest
there. Also, at this level, the soul speaks to you. If you sense your
relationships sufficiently at this level, your light will spread into the world
because it has grounding in your earthly emotions, in your humanity.
Now move upward to your heart and become aware of the
spaciousness of your heart. From the perspective of your heart, take another
look at the relationship that is the focus of your attention and feel the
connection between you and the other, or the possible lack thereof. The heart
is more spacious than the abdomen, it can often see things from a different
vantage point because it is connected to your soul. But the heart knows that a
good connection must also feel right at the level of the abdomen and that there
must be, on the human level, a balance between giving and receiving.
Now let go of this specific relationship and feel yourself as
part of a network, a field of relationships. Feel how much light
wants to flow toward you from that field; all kinds of intelligences, of living
souls, are connected with you. There are those who are less bound to time and
space and who have a wider perspective than you, because they are free from
bondage to the Earth. Feel in this moment their light and assistance, and feel
how they want to support and encourage you in your work on Earth. They create
much joy and light within you, so receive it and feel supported.
You are doing consciousness work, which is more important than
you think. It is work that has great capability and scope, and is not only for
you, personally. The souls that befriend you from the other side offer their
cooperation to support you in that work, so receive their love. Let your aura
be filled with the light of that other world that you know very well, a world
of lightness and freedom and comfort. Let it flow through all your body cells,
from your crown to your feet.
I thank you for your inner work and I salute you with gladness
and joy.
© Pamela Kribbe
www.jeshua.net
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