Isis Alada: El gráfico del solsticio del 21 de diciembre, el Sol parece detenerse. Después de este día, el Sol gradualmente volverá a ascender hacia el norte, Por Lauren

sábado, 21 de diciembre de 2024

El gráfico del solsticio del 21 de diciembre, el Sol parece detenerse. Después de este día, el Sol gradualmente volverá a ascender hacia el norte, Por Lauren

El gráfico del solsticio del 21 de diciembre Por Lauren

Éste es el solsticio, el punto quieto del sol, su cúspide y la medianoche, el umbral del año y Desbloqueo, donde el pasado se libera y se convierte en futuro; el lugar donde se recupera el aliento, la puerta de una casa desaparecida que quedó entreabierta… ~ Margaret Atwood

La carta del solsticio del 21 de diciembre no solo marca el ingreso del Sol en Capricornio, sino que también marca el tono para el próximo trimestre del año. Y al observar la carta del solsticio del 21 de diciembre (4:20 AM aquí en la costa este de los EE. UU.), parece estar uniendo todas las tendencias predominantes y algunas de las tendencias entrantes. Como una instantánea de nuestras vidas, podemos ver dónde se están tejiendo algunos hilos y dónde otros simplemente están colgando, y tal vez incluso desenredándose.

Parece haber tres elementos importantes en este gráfico. El primero es que el Sol, que es la estrella del espectáculo, se encuentra actualmente en la curvatura o cuadratura del eje nodal (el eje del eclipse). Esto, en sí mismo, indica un momento de transición y cambio. Mientras nos encontramos aquí, podemos ver que algunas puertas se cierran y otras se abren. Tenemos una idea de lo que el pasado representó para nosotros. Pero lo que hace que esto sea un poco exasperante es que la puerta que se está abriendo está velada por Neptuno, todavía en sus últimos grados de Piscis. Literalmente, no podemos ver lo que predice el futuro. Más bien, parece que estamos entrando en una niebla, sin un mapa de ruta ni una luz que guíe el camino.

Es difícil ver un camino claro cuando Neptuno se encuentra sobre los Nodos, por lo que entramos en esta nueva era con una gran cantidad de preguntas sin respuesta, malentendidos y confusión. Para conocer la verdad, damos vuelta cada piedra, investigamos cada pista, queriendo resolver el misterio del futuro que permanece inescrutable.

Vivir con incertidumbre y contradicción puede ser muy difícil y frustrante. Y como hemos sufrido decepciones y decepciones en el pasado, ya no sabemos en quién o en qué confiar. Por eso intentamos llenar el vacío con nuestra imaginación y nuestros miedos, que, para ser sinceros, no suelen ser tan fiables.

Sin embargo, aunque no podamos ver claramente nuestro camino, no tenemos otro lugar al que ir que hacia adelante. Como lemmings en dirección al mar, o como si fuéramos arrastrados por una niebla efímera, estamos siendo llamados. Puede que no encontremos la claridad que buscamos, pero aun así se nos pide que tengamos fe. La fe en que de alguna manera, siguiendo nuestras guías internas: nuestra conciencia, nuestros corazones, nuestra propia verdad realizable, seremos llevados exactamente a donde necesitamos estar. Todos estamos siendo arrastrados por esta marea. Pero también estamos encontrando nuestro propio camino. El primero parece inevitable. El segundo depende de nuestras decisiones.

Cuando el camino es incierto, hay que ir un poco más despacio. Es como conducir en una noche de niebla o entrar en una habitación oscura llena de muebles. Simplemente hay que reducir la velocidad. ~ Jerome Powell (presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos)

El 24 de diciembre se producirá la segunda de las tres cuadraturas exactas entre Júpiter y Saturno, que se encuentra en el punto focal de la segunda parte de la carta del solsticio. El día y la hora del solsticio, la Luna, que está en Virgo, formará una oposición exacta con Saturno y una cuadratura con Júpiter, lo que creará una cuadratura en T, que es un aspecto de conflicto, o quizás de cierta reticencia e indecisión. Esto también se vincula con la tercera oposición de Mercurio y Júpiter, que se produce exactamente el 26 de diciembre.

Mercurio y Júpiter han estado bailando en sus respectivos signos (Mercurio en Sagitario y Júpiter en Géminis) durante semanas. Esto ha sido responsable de gran parte de ese disimulo disperso que todos hemos estado experimentando desde mediados de noviembre. El movimiento retrógrado de Mercurio no hizo nada para ayudar a las circunstancias en las semanas siguientes. Abrumados por una abundancia de información que permeaba las ondas de radio y nuestras mentes, muchos se sintieron abrumados e incapaces de procesar nada. Y la pobre Luna asediada en Virgo en la carta del Solsticio está tratando de darle sentido a lo insensible.

Como pastorear gatos o palear nieve en una tormenta de nieve, tenemos mucho trabajo por delante. La diferencia es la cuadratura con Saturno. Mercurio/Júpiter en los signos móviles de Sagitario y Géminis no tiene límites y es interminable, ya que nos bombardearon con información desde todos los lados, sin poder mirar hacia otro lado y sin poder entender nada de eso. Saturno nos pide a todos que establezcamos límites apropiados, que verifiquemos los hechos, que limitemos nuestro consumo y que eliminemos el ruido. Lamentablemente, es probable que también tenga otros efectos nocivos.

Géminis y Sagitario contienen las fuentes de nuestra información. Y la verdad es que gran parte de los medios de comunicación han estado dando tumbos. Algunas fuentes muy respetadas han estado divagando y no necesariamente tomando una postura cuando deberían haberlo hecho. Otras han estado consintiendo. Algunas corren el riesgo de rendirse. Saturno nos está pidiendo a todos que nos controlemos.

Con Neptuno en el Nodo Norte, necesitamos aprender a discriminar, procesar, editar y organizar. Necesitamos faros, estrellas polares y mapas de ruta. No clics frenéticos, exageraciones e insinuaciones. A veces, todo lo que necesitamos hacer es bajar el ritmo.

Júpiter ha estado intentando que veamos las cosas desde otra perspectiva y que crezcamos más allá de nuestras creencias y suposiciones previas limitadas. Que veamos la verdad, que conozcamos la verdad y nos aferremos a ella, que creamos en ella incluso cuando las fuentes confiables de información están siendo reprimidas y las fuentes no confiables están causando estragos. Júpiter quiere que crezcamos y que aprendamos. Saturno puede frenarnos por miedo, y tal vez incluso por control. Pero Saturno también puede ayudarnos a filtrar la miríada de información, organizarla y luego darle sentido.

Cuando Júpiter y Saturno trabajan juntos, vemos un plan claro que se desarrolla ante nosotros. Cuando se oponen entre sí de esta manera, podemos sentir al mismo tiempo que hay demasiado que procesar y que nos vemos limitados a la hora de recibir la información que realmente necesitamos para tomar decisiones claras en el futuro.

La tercera parte de la carta del solsticio es una configuración llamada Martillo de Thor, centrada alrededor de la sesquicuadratura entre Júpiter y Plutón. La Luna en Virgo, en la carta del solsticio, también está formando una sesquicuadratura con Plutón. Esta es la definición misma del Martillo de Thor: 2 planetas en cuadratura entre sí (Luna y Júpiter) mientras ambos forman una sesquicuadratura con otro (en este caso, Plutón). El nombre sesquicuadratura por sí solo suena a trabalenguas.

Estos aspectos menores pueden ser indicativos de circunstancias con las que tal vez hemos estado viviendo durante muchos años, quizás décadas, quizás vidas enteras, y simplemente asumimos que esto era el corazón y la naturaleza misma de la experiencia humana. Entonces, ¿por qué cambiarlo? ¿Por qué cuestionarlo? Incluso si fuera degradante, incluso si pudiera ser racista, impío, desmoralizante, controlador o inhumano por naturaleza, vivimos con la desigualdad, la incomodidad, como si fuera simplemente una parte de la vida misma, y por lo tanto no necesariamente "hacemos" nada al respecto.

Estas son cosas que no cuestionamos, pero cuando nos damos cuenta de estas circunstancias y las vemos como son, ¡ya no podemos ignorarlas! Es posible que las hayamos soportado porque estábamos acostumbrados a ellas, o las soportamos para no causar problemas, o sentimos que no había otra opción que lidiar con la fricción internalizada que estaban causando.

Pero Plutón, que quizás sea parte del problema, está ahora en Acuario, y en Acuario nos damos cuenta de que el sentimiento popular puede ser muy poderoso. Por nuestra cuenta, individualmente, tal vez no tengamos mucho impacto, pero cuando unimos nuestras fuerzas en solidaridad con los demás, tenemos la capacidad de superar incluso las fuerzas más extraordinarias. Y ahí es donde comienza la transición.

El 3 de enero, Marte se opondrá a Plutón y nos traerá los resultados de causas que ya se han puesto en marcha. Marte es un catalizador. Sin embargo, en su fase retrógrada también está acumulando un enorme pantano de resentimiento, ira y frustración, que podría desatarse con la oposición a finales de año. Esto podría ser inestable. Podría tener efectos volcánicos. Pero también podría ser un impulso para que entendamos lo que realmente se siente al estar empoderado. Al ser fuerte. Al ser una fuerza para el cambio progresivo. Y luego llevar ese conocimiento con nosotros al Año Nuevo.

Hay MUCHO que digerir, especialmente en lo que se supone que es la época más espiritual del año. Razón de más para refugiarse, hacer coronas de flores en agradecimiento al Señor de la Luz, rendir homenaje a los dioses que elijamos y ofrecer oraciones al Sol recién nacido.

El 21 de diciembre, el Sol parece detenerse. Después de este día, el Sol gradualmente volverá a ascender hacia el norte, trayendo consigo más horas de luz. En la oscuridad que precede al amanecer, nos enfrentamos a nuestro propio viaje del alma en busca de esa luz efímera de la iluminación. Ya sea que la busquemos a través de rituales, religión, comunidad, oración, fiestas, luces y velas navideñas, amor y abrazando las maravillas de la naturaleza, también trae esperanza de renovación, de renacimiento, de sabiduría y luz. Y si podemos surfear esta ola, nos llevará y nos llevará a donde necesitamos ir. Solo necesitamos mantener la fe.

Esta es quizás la base a partir de la cual evolucionaron los propósitos de Año Nuevo, reconociendo que con este cambio llega una renovada oleada de propósito y crecimiento. Esto será aún más así, con la Luna Nueva en Capricornio justo antes del Año Nuevo. Que nuestros corazones y mentes estén abiertos a la bondad y la verdad, para que estas sean nuestras luces guía, incluso y especialmente frente a la incertidumbre.

La verdadera Navidad significa algo para el hombre verdadero y se aplica a toda la naturaleza humana. Aprovechemos el resurgimiento de la fuerza espiritual, mental y moral que llega con la época navideña. Son los sentimientos y los pensamientos que hay en nuestro corazón los que llegan a las personas y los conmueven hacia un sentimiento mejor, una acción más amplia y más fuerte, porque todos nuestros corazones se basan en la misma Vida Única. ~ Robert Crosbie

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Publicado por ”Isis Alada” 🌹