¿Qué es la Kundalini?
La Kundalini es el flujo imparable de la energía creadora del
Poder Místico. Es un proceso de despertar y purificar, a través del canal
energético, las energías acumuladas de muchos años, las energías nocivas que
nos impiden la visión y comprensión de nosotros mismos y de la realidad.
El Fuego Serpentino, la Kundalini, el Poder Místico, esta
trilogía es una misma cosa, pero con diferentes matices. El Fuego Serpentino
enciende, calienta y abrasa. La Kundalini fluye cuando el Fuego ha incinerado
los residuos nocivos que se han incrustado en la conciencia, dando paso al
despertar del Poder Místico. El Poder Místico es el poder implacable, que no se
puede alcanzar. Pero, sí puede acompañarte y protegerte, cuando haces lo
correcto en relación al propio proceso de la Kundalini.
El Fuego de la energía entra como un chorro, formando un
torbellino en el conducto vertebral; el fenómeno consiste en movimientos de
arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba, recorriendo el canal energético.
El hecho de la Kundalini, es decir, la existencia de la
Kundalini, sirve para que uno despierte del dolor. Y, ¿cuál es el dolor? La
retención de la negatividad es la causante de todo el sufrimiento que sentimos.
El problema, realmente, no es la negatividad en sí misma, el problema reside en
retener a ésta: retén la negatividad y, poco a poco, te hará pedazos. Cuando
las energías son retenidas, sean positivas o negativas, ahí puede ocurrir lo
peor, sobre todo cuando se están reteniendo las dos a la vez, y esto ocurre muy
a menudo en los movimientos de Kundalini. En algunos casos, la falta de la
liberación de las dos energías puede llegar a ocasionar desequilibrios físicos
y mentales, temporales o permanentes. Por esta razón, la comprensión de la
Kundalini no reside en buscar una iluminación espiritual, sino en aprender a
liberar las energías, pero de forma equilibrada. En la naturaleza existe esta
liberación; en todo lo creado existe esta liberación. Si no fuera así, no
existiría nada, porque la retención es la corrupción, es el fin.
Por tanto, la Kundalini no es una técnica para aliviar nuestros
sufrimientos mundanos. La Kundalini es despertar a la realidad del ‘ego’ y sus
consecuencias; la Kundalini es la caridad humana. El camino de la Kundalini es
como un barco, donde los tripulantes no pueden ir cada uno por su lado. Es más,
será ensalzado el que lleve a cabo un acto que vaya más allá de sus
posibilidades. Cuando ese acto sea para beneficio de la tripulación, eso jamás
significará que ha actuado por egoísmo, sino para beneficio de los demás. La
valía de un hombre no se mide por sus logros egoístas, sino por sus logros
altruistas. Y aquí dejo constancia que la unión unilateral es la única
salvadora—si el concepto es el correcto—.
Por eso, el camino de la Kundalini tiene que ser unilateral. Y
aún así vengan opiniones adversas hacia la realidad de la Kundalini, si
mantenemos una actitud íntegra, estas nos ayudarán a fortalecer ese vínculo
unilateral. Ahora puedo decir que el camino unilateral con la Kundalini es
fuente de dicha, porque la dicha no está donde uno creé que está; ella aparece
sin más cuando estamos sincronizados con la poderosa Kundalini.
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