Isis Alada: Luna llena de Sagitario, 23 de mayo de 2024 Por Natalia Alba

lunes, 20 de mayo de 2024

Luna llena de Sagitario, 23 de mayo de 2024 Por Natalia Alba

Seres queridos,

Navegar por las energías actuales puede ser un desafío para muchos de nosotros, ya que hemos estado experimentando durante meses la intensidad de las muchas transmisiones y activaciones descendidas por nuestro Ser Iluminado. Durante este tiempo de profunda integración, recalibración y transfiguración de chakras, ahora damos la bienvenida el 20 de mayo a las energías de Géminis, el 23 de mayo, una Luna Llena a 2 grados Sagitario. Un pasaje que nos ayudará en nuestro proceso de liberación al sembrar más amor, alegría y armonía en medio de esta intensa ola energética.

Este es un momento de profundo trabajo interior, por eso es tan importante recuperar y encontrar tiempo para la introspección y la comunión del alma, a través de la alegría, para que se nos revele lo que necesitamos sanar y aclarar para estar más alineados y discernir nuestro ser personal.

Tanto Géminis como Sagitario se complementan, pues Géminis representa la mente inferior, mientras que Sagitario la superior, ambos son vitales para nuestro bienestar y crecimiento espiritual, pues esto es precisamente lo que estamos aquí para lograr, el equilibrio y la comunión entre ambos. Ambos nos ayudan en nuestro proceso interno de limpieza mental, ya que Géminis rige la mente humana, mientras que Sagitario representa nuestro centro de poder, que es como saben el ego y nuestro cuerpo mental.

Astrológicamente tenemos un sextil entre la luna y Plutón, que es lo que nos ayudará a reconectarnos con la Verdad, a través de la comunión del alma, recibiendo las revelaciones que necesitamos para nuestro viaje de sanación personal y misión de asistencia.

Plutón también es de gran apoyo en la transformación que estamos teniendo ahora, ya que su esencia también es muy regenerativa, lo cual es fundamental después de todo el trabajo que estamos haciendo, especialmente en nuestra estructura ósea, pues como muchos de ustedes saben, la ascensión también es fuerte. Se siente en nuestros huesos, porque a medida que liberamos densidad y nos transformamos, ellos serán los que notarán más la frecuencia más ligera que ahora estamos encarnando.

Nuestro yo herido puede emerger en este momento, especialmente con la luna en sextil con Plutón y la armonización con Neptuno. A medida que sigamos pelando más capas viejas de nosotros mismos, resurgirán más emociones ocultas. Sin embargo, es aceptando el dolor e integrando las lecciones que nos brinda que podemos superar el sufrimiento, expandir nuestro corazón y aceptar nuestra vulnerabilidad como un regalo.

Además, tenemos una oposición entre la Luna, Venus y Júpiter. Esta frecuencia es una bendición para ayudarnos a realinear, expandir y profundizar la conexión de nuestra alma, ya que se trata precisamente de reconectarnos con el amor que somos, expandirnos dentro de él para sanarnos y empoderarnos.

Cuando estamos inmersos en mejoras y situaciones desafiantes, podemos olvidar nuestra capacidad de recargarnos naturalmente a través del amor que reside en nuestro interior, no en los demás, como suele suceder. Es al reconectarnos con nuestra infinita fuente interior de amor que recuperamos la pureza. Una Fuente de Amor que regenera constantemente nuestros cuerpos y que nos sostiene a todos, infinitamente.

Las energías de Géminis, que ya se sienten fuertemente en este momento, nos ayudarán a continuar creando autosíntesis, saliendo de la fijación hacia un estado de ser más unificado y completo. Además de gobernar nuestras mentes, el centro de energía de nuestro cuerpo asociado con Géminis es precisamente nuestro tercer chakra, el último para sanar y limpiar antes de que podamos entrar en los niveles del alma, que comienza, como saben, en el cuarto centro o dimensión del corazón. hasta el sexto.

Con Géminis seguimos limpiando los programas de control mental, los de creación propia y, sobre todo, el ego, el cuerpo mental, de todos los patrones y juicios egoicos. Mientras que la figura geométrica asociada a Sagitario es el tetraedro, ya que representa la comunión entre nuestro ser humano y divino, la geometría asociada a Géminis, que es una compleción de la anterior, es un octaedro, dos pirámides opuestas que representan la síntesis completa entre ambos planos de existencia.

Visualizarnos dentro de ambas geometrías, comenzando con el tetraedro y completándolo con el octaedro, nos ayuda a fortalecer nuestra línea hara y es de gran ayuda para enviar la visualización a nuestra mente, células del cuerpo y por ende al ADN, de la reconexión del alma, enviando el mensaje de nuestro deseo de permanecer en equilibrio y alineación con nuestro ser humano y divino.

Sagitario es un signo cuya esencia de fuego es para que transmutemos lo que no sirve, resucitando en los seres iluminados que somos. Esto, junto con las transmisiones Sol-AR, es una gran fuente de transformación personal, a pesar de la intensidad que nuestros cuerpos están enfrentando durante este tiempo.

Una vez que decretemos nuestro propósito y utilicemos el elemento fuego para liberar todos los desechos de nuestros cuerpos, visualizar el rayo de diamante invadiendo nuestro campo sagrado dentro del octaedro nos ayudará a purificarnos y desbloquear nuestro ADN y nuestros receptores cerebrales, que como saben son clave. a decodificar la luz, la información, que estamos procesando en este momento debido al descenso masivo que estamos integrando.

Limpiar nuestros cuerpos mentales y estar conectados a tierra es esencial para limpiar los canales de nuestro cuerpo, permitiendo que la luz fluya y restaurando todos los conductos dañados. Nuestro ADN y nuestros receptores cerebrales son clave para que podamos sentir las energías, ya que todo tiene una firma luminosa, no solo nosotros mismos, y esto es precisamente lo que nos ayuda a diferenciar lo auténtico de lo inorgánico, en términos de energía.

Tenemos un regalo cósmico en este momento con las energías de Sagitario para que eliminemos todas las esencias inorgánicas, la falsa puntualidad y las conexiones energéticas de nuestros cuerpos físicos y no físicos, para pasar a un estado de ser totalmente nuevo. Géminis es un gran aliado para ayudarnos a borrar viejos programas mentales, mientras que Sagitario nos ofrece la oportunidad de renacer, después de toda esta fase transformacional, como lo hace el fénix, en seres iluminados.

Las energías de Sagitario también son vitales para ayudarnos a limpiar los implantes cátaros y los recuerdos de guerra cátaros, y para que los descendientes de Gold-Serpahim limpien las esencias falsas de los serafines y los implantes porta hombros.

En este momento se nos está ayudando a renacer de las cenizas de lo viejo. La elección es nuestra de continuar haciendo nuestro trabajo interior en perfecta alineación con las energías y la comunión con nuestra alma, mónada y el Ser de Dios.

Nuestro viaje de ascensión no siempre es un lecho de rosas, pero vale la dedicación y el esfuerzo que ponemos en todo lo que hacemos, porque es lo que nos permite renacer en quienes realmente somos, recuperando la Verdad, el amor y el poder que nos libera de la esclavitud mental y energética, porque vinimos aquí para reclamar nuestra soberanía y capacidad de crear para nosotros mismos.

Siempre hay un camino si hay Voluntad.

Que tengan la Voluntad, el Amor y el Poder para convertirse en quienes son, Amados.

Dentro del Amor Infinito,

Natalia Alba

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Publicado por ”Isis Alada” 🌹