La reunión y la fusión de los principios Masculinos y Femeninos en ustedes,
representa la llave de vuestra Elevación, y de vuestra Ascensión
Buenos días Pascal, soy María.
La espera debe ser transmutada, porque ahí estáis, mis niños. El cambio pronto no será más que un asunto de percepción. Entonces por supuesto, la transición sigue y las energías se mezclan, teñidas de diferentes colores. Sin embargo la nueva energía está presente y puede ser percibida a través de lo vivido. Podéis también operar esta separación en el interior y proyectarla por fuera. Es por otra parte la próxima etapa de vuestra evolución y de lo esperado.
La aceleración y la intensificación de las energías recibidas no os dejarán pronto más la elección, porque el equilibrio se inclinará resueltamente del lado del cambio dimensional. La espera será así reemplazada por el acta en la que una nueva realidad se manifiesta, finalmente, sobre la Tierra. Este cambio estará percibido y vivido tanto sobre el plano individual como colectivo. Veréis así manifestarse los cambios que anunciamos y cada uno reaccionará con arreglo a las informaciones que dispondrá, de su preparación y de toda la ayuda que podrá recibir.
Estáis viviendo este básculamiento 'ahora'. Sin embargo muchos todavía dudan de su realidad, prefiriendo guardar los ojos cerrados: «por temor a que se conviertan y que yo no los cure »! [1] La ceguera es el hecho de un espíritu qué se niega « a entrever » lo que no comprende y se engancha a la realidad que «percibe» sin incluso «percibirse» que la proyecta en sobreimpresión de otra realidad vivida por el cuerpo y el corazón «Aquí y Ahora»!
Estos dos niveles de realidad no son siempre compatibles y provocaron una separación entre los niveles conscientes e inconscientes de vuestra psique. Sin embargo: «buena sangre no sabría mentir» y sería el tiempo ahora para vosotros de reconocer, a partir del plano terrestre, el primado del cuerpo y del corazón sobre el espíritu. Este último todavía os proyecta según esquemas o argumentos heredados del pasado, que no están más en acorde con la nueva rejilla terrestre y las energías de la quinta dimensión. Mantienen cada vez más de manera artificial esquemas de falta, de miedo o de protección que no os sirven más y sobre todo que no sentís más. ¡Escuchad vuestro corazón! Ved la evolución de los pueblos actualmente sobre la Tierra o la de los 'nuevos' niños y tomad nota, finalmente, de las energías que os llevan e incitan a avanzar, así como a manifestar plenamente los cambios sobre la Tierra.
El cambio dimensional está en curso, cierto, irrevocable e inalterablemente. Estáis actualmente entre dos aguas, en el fin de un ciclo y al principio de uno nuevo, pero no solamente. Es mucho más que esto. Cuando alcancéis la otra orilla, os despertaréis de un largo sueño y percibiréis que algo habrá cambiado, que una nueva realidad habrá emergido, a la cual tendréis acceso y en la cual seréis llevados a crear, con otros, una nueva manera de manifestar la Vida. Será súbito, sutil, pero real.
Este 'Evento' será vivido colectivamente, incluso si muchos no creerán por sus propios ojos. Esto parecerá 'increíble' y sin embargo, en el fondo de vosotros mismos, sabréis de modo cierto que lo que fue anunciado se hizo realidad. Vuestros ojos se abrirán entonces al espectáculo de una Tierra renovada y regenerada, en la cual os reconoceréis porque formáis parte de ella y que nada ni nadie puede sustraerse o ser sustraído de la ecuación Universal y multidimensional de la Vida.
Os acompañamos y observamos, pero sois los que experimentáis esta etapa ascensional. Es más fácil por ejemplo observar una noria que encontrarse en el interior. El observador ve el conjunto del 'carrusel' sin moverse, mientras que el pasajero recorre cada radio de la rueda, observando lo que es accesible desde su 'punto de vista'. El pasajero conoce altibajos, viviendo cada etapa del ciclo, mientras que el observador percibe el conjunto sin poder sentir los efectos. Cuando la rueda se para, los pasajeros descienden por turno, acogidos por los que les observaban «desde abajo». Así es como os acogeremos, cuando nos alcancéis a la salida «por lo alto» de esta rueda Kármica.
Una nueva era comenzará entonces sobre la Tierra para la cual habíamos acordado reencontrarnos y apoyarnos, de corazón a corazón.
Para los que sois (cuerpos) sensibles y abiertos (corazón), podéis sentir desde ahora la presencia y los efectos de las nuevas energías que se vierten en y alrededor de vosotros. Las observáis y probáis, porque las vivís. No hay manera de pasar a través de las rejillas de la red. Es vuestra misión y vuestra iniciación.
El fin es la Ascensión, o sea la elevación de vuestra conciencia a un nivel 'anterior', o sea el regreso al Hombre Adámico anterior a la caída, tal como engendrado por los Elohim como Yod/Heva reunidos. La reunión, luego la fusión de los principios masculinos y femeninos en vosotros, lo dijimos, [2] representa la clave de vuestra elevación y de vuestra ascensión. El ciclo y los eventos exteriores os conducen a la separación de estos dos principios. El ciclo y los acontecimientos interiores os conducen a vuestra reunión. Ahora debéis escoger vuestro camino, porque los eventos van a acelerarse en el interior como al exterior. Para la mayoría la elección ya está hecha, sin embargo algunos todavía se sitúan entre dos aguas. Comprendan que será difícil dar marcha atrás cuando los acontecimientos se 'precipiten'.
Ayudas, mensajes, sincronizaciones se pondrán en marcha que cambiarán lo que pronto será percibido y vivido, de modo que cada uno podrá encontrar su sitio en el seno de la evolución colectiva. La ola está presente. Podéis sentirla y observarla en vosotros-mismos, como podéis observarla y vivirla al exterior. No os dejéis arrastrar por los flujos de informaciones que envían los medios. La observación no implica de dejaros arrastrar por las imágenes y los sonidos que os alcanzan. El desapego es necesario para permitiros quedar centrados y mantener la conexión interior. Estaréis sorprendidos, y no comprenderéis todo, sin embargo lo que vais a vivir quedará para siempre grabado en vuestras memorias y anales colectivos. Olvidaréis rápidamente los dolores del nacimiento y estaréis orgullosos de haber participado en el cambio. No os equivoquéis y quedaos centrados en lo esencial.
Algunos eventos pueden parecer no celebrarse según lo previsto, mientras que nuevos factores intervienen, impidiendo a los antiguos argumentos reproducirse, a veces contra toda previsión. Los cambios se desarrollan a varios niveles en el espacio y en el tiempo, exigiendo ciertos ajustamientos que no podéis percibir con una conciencia y un espacio de tercera dimensión. Lo que funcionaban ayer ya no funciona más hoy y los viejos esquemas no funcionan más. Podéis observar estos cambios en el encadenamiento de los acontecimientos en curso.
Debéis comprender que la vida se desarrolla al interior de un flujo de luz visible e invisible, y que este flujo puede ser modulado. Esto se parece a un juego de construcción para niños. De niños, jugabais y construías con piezas uniformes, que os permitían acabar rápidamente una construcción que demolías tan rápidamente para construir otra. Observad por otra parte que los niños toman tanto placer en construir como en demoler! Creciendo, los juegos de construcciones se hacen más complejos, esta complejidad yendo a la par con la 'reducción' de los materiales utilizados. Este proceso sigue a la edad adulta, las evoluciones tecnológicas traducen una maestría cada vez más empujada en los elementos que entran en la composición del viviente. El conocimiento evoluciona pues de lo grosero hacia a lo sutil, a partir de los mismos materiales de base. Es una regla universal que también se aplica a la Luz, a partir de La Fuente. Creáis y evolucionáis así, a diferentes niveles de la Luz ésta representando un aspecto esencial, pero no exclusivo, de la experiencia vital.
Nuevas frecuencias, más sutiles, son ahora accesibles que os permitirán 'jugar', de nuevo, a un nivel superior de la evolución. El verbo 'jugar' os chocará tal vez, pero esta empleado a sabiendas para recordaros que la Tierra se encontró anexionada por fuerzas involutivas, procedentes de dimensiones superiores y en consecuencia de guerras 'galácticas' que estuvieron a punto de destruirla repetidas veces. Vuestro sistema solar guarda en varios lugares la marca de estas guerras. [3] Vuestros juegos 'virtuales' o vuestras películas «de ciencia ficción» os recuerda estos hechos enterrados en la memoria colectiva, de la cual sacan así ciertos autores o artistas para ponerlas en escena.
La Ascensión consiste, en vuestro mundo, en cambiar de frecuencia, al interior de un paradigma de Luz multi – frecuencial o multi-dimensional. En este contexto, la conciencia representa primero un atributo de la Luz. Por oposición, en vuestro modo de conocimiento, el Inconsciente representa un atributo de la Fuente, que algunos también llaman el Absoluto. La Fuente (Alfa) y el destino (Omega) se reúnen en el círculo, símbolo del Uroboros:
La escalera de la vida que, a imagen de la escalera de Jacob, relaciona la Tierra y el Cielo, debe pues ser comprendida y interpretada como círculo, cuyos radios forman los barrotes de la escalera dimensional.
Proyectad por otra parte este círculo en el espacio (profundidad) y
obtendréis una hélice, a la imagen de vuestro ADN o de las ondas
electromagnéticas. Esta representación también evoca el 'túnel' tomado en el
momento del nacimiento (Alfa) o al de la muerte (Omega). Los portales y vortex
energéticos también toman esta configuración circular. Esta 'Noria' también es
la del zodíaco, para transcribir la configuración galáctica y la de Ezequiel,
para describir el ciclo karmico. Estos 'misterios' ahora deben ser desvelados y
prestados.
Debéis aprender o más bien reaprender a crear y a trabajar con conceptos y energías más sutiles. Ciertos radios os fueron escondidos, que os son en lo sucesivo y de nuevo accesibles. Aprended primero a reconocerlos y tomad la medida de las potencialidades que os ofrecen para vuestra evolución. Os ayudaremos. Pasando el tiempo de la Revelación, vendrá el de la Regeneración. Las nuevas energías están vivas y actúan profundamente. Ellas os transforman más de lo que imagináis. Tendréis que integrar estas energías en conciencia y hacerlas vivir en y alrededor de vosotros.
No os paréis solamente en los aspectos exteriores de vuestra vida. Sentid los cambios que se producen al nivel del cuerpo físico y sentid los que se producen en el corazón. Vuestras vibraciones cambian y nuevas frecuencias se os hacen accesibles. El despertar está cerca. Es el tiempo, ahora de asimilar, de revelar y de manifestar 'el Espíritu' contenido en las partículas energéticas que absorben. Vuestra vida, como lo que representáis sobre la Tierra, de naturaleza trinitaria: Cuerpo (materia) – Corazón (energía) – Espíritu (conciencia). Ahora abordáis, para los que estáis listos, la tercera etapa de vuestra ascensión.
«Lo que está abajo es como lo que está arriba, y lo que está arriba es como lo que está abajo.» A partir del Cielo y del Espíritu, alcanzáis la Materia, mientras que a partir de la Tierra y de la experiencia física, alcanzáis el Espíritu. Entre los dos pasan por el Corazón. El principio que pasa del uno al otro y del otro al uno es el mismo. Sólo la forma y las experiencias difieren. Empezando el camino de la vuelta hacia la Fuente, es decir la Ascensión, iniciáis la experiencia de una reunificación de los aspectos separados de vuestro ser.
Esta reunificación se produce en el espacio y el tiempo. El Espíritu se proyecta en el espacio y se viste de múltiples formas a través de las cuales se manifiesta como «Yo Soy». Cambiando de espacio, transformáis así la manera y las posibilidades de manifestar las formas que creáis. El espacio representa la conciencia y el corazón de lo que sois. Es el lazo que relaciona todas las experiencias en el tiempo (transversalidad) y las dimensiones (verticalidad). Cambiando de espacio, cambias pues de tiempo y de nivel de conciencia. Los ciclos están hechos para ser renovados o sobrepasados. La vida es movimiento. El cambio es constante. La evolución es la regla. El compás es el tiempo. El espacio es conciencia. El espíritu es la fuente. Sois mis niños. El tiempo nos separa. El amor nos reúne.
María.
[1] « Es por eso que os hablo en parábolas, porque viendo no veis y entendiendo no entendéis ni comprendéis. Y para ellos se cumple esta profecía de Isaías: Escuchareis con vuestros oídos, y no comprenderéis en absoluto; Veréis con vuestros ojos, y no veréis en absoluto. Porque el corazón de este pueblo se hizo insensible; ellos endurecieron sus oídos y cerraron sus ojos, por temor de que sus ojos vean, temor de que escuchen sus oídos, temor de que comprendan su corazón, temor de que se conviertan y que les sane. » (Mateo 13.14)
[2] Ver mensaje precedente.
[3] Por ejemplo, el cinturón de Asteroides, situado entre Marte y Júpiter, contiene los restos de un planeta destruido (Mulge) por explosión atómica, en consecuencia del cual su satélite (Mulge Tab) derivó en el espacio hasta estabilizar su órbita, la de Vénus (Neb Heru) hoy. Para más informaciones, ver las obras de Anton Parks (Las crónicas de Girku – Ediciones Nueva Tierra) o de Drunvalo Melchizédek (El antiguo secreto de la Flor de vida – Ediciones Ariane)
Debéis aprender o más bien reaprender a crear y a trabajar con conceptos y energías más sutiles. Ciertos radios os fueron escondidos, que os son en lo sucesivo y de nuevo accesibles. Aprended primero a reconocerlos y tomad la medida de las potencialidades que os ofrecen para vuestra evolución. Os ayudaremos. Pasando el tiempo de la Revelación, vendrá el de la Regeneración. Las nuevas energías están vivas y actúan profundamente. Ellas os transforman más de lo que imagináis. Tendréis que integrar estas energías en conciencia y hacerlas vivir en y alrededor de vosotros.
No os paréis solamente en los aspectos exteriores de vuestra vida. Sentid los cambios que se producen al nivel del cuerpo físico y sentid los que se producen en el corazón. Vuestras vibraciones cambian y nuevas frecuencias se os hacen accesibles. El despertar está cerca. Es el tiempo, ahora de asimilar, de revelar y de manifestar 'el Espíritu' contenido en las partículas energéticas que absorben. Vuestra vida, como lo que representáis sobre la Tierra, de naturaleza trinitaria: Cuerpo (materia) – Corazón (energía) – Espíritu (conciencia). Ahora abordáis, para los que estáis listos, la tercera etapa de vuestra ascensión.
«Lo que está abajo es como lo que está arriba, y lo que está arriba es como lo que está abajo.» A partir del Cielo y del Espíritu, alcanzáis la Materia, mientras que a partir de la Tierra y de la experiencia física, alcanzáis el Espíritu. Entre los dos pasan por el Corazón. El principio que pasa del uno al otro y del otro al uno es el mismo. Sólo la forma y las experiencias difieren. Empezando el camino de la vuelta hacia la Fuente, es decir la Ascensión, iniciáis la experiencia de una reunificación de los aspectos separados de vuestro ser.
Esta reunificación se produce en el espacio y el tiempo. El Espíritu se proyecta en el espacio y se viste de múltiples formas a través de las cuales se manifiesta como «Yo Soy». Cambiando de espacio, transformáis así la manera y las posibilidades de manifestar las formas que creáis. El espacio representa la conciencia y el corazón de lo que sois. Es el lazo que relaciona todas las experiencias en el tiempo (transversalidad) y las dimensiones (verticalidad). Cambiando de espacio, cambias pues de tiempo y de nivel de conciencia. Los ciclos están hechos para ser renovados o sobrepasados. La vida es movimiento. El cambio es constante. La evolución es la regla. El compás es el tiempo. El espacio es conciencia. El espíritu es la fuente. Sois mis niños. El tiempo nos separa. El amor nos reúne.
María.
[1] « Es por eso que os hablo en parábolas, porque viendo no veis y entendiendo no entendéis ni comprendéis. Y para ellos se cumple esta profecía de Isaías: Escuchareis con vuestros oídos, y no comprenderéis en absoluto; Veréis con vuestros ojos, y no veréis en absoluto. Porque el corazón de este pueblo se hizo insensible; ellos endurecieron sus oídos y cerraron sus ojos, por temor de que sus ojos vean, temor de que escuchen sus oídos, temor de que comprendan su corazón, temor de que se conviertan y que les sane. » (Mateo 13.14)
[2] Ver mensaje precedente.
[3] Por ejemplo, el cinturón de Asteroides, situado entre Marte y Júpiter, contiene los restos de un planeta destruido (Mulge) por explosión atómica, en consecuencia del cual su satélite (Mulge Tab) derivó en el espacio hasta estabilizar su órbita, la de Vénus (Neb Heru) hoy. Para más informaciones, ver las obras de Anton Parks (Las crónicas de Girku – Ediciones Nueva Tierra) o de Drunvalo Melchizédek (El antiguo secreto de la Flor de vida – Ediciones Ariane)
Traducción: Pierre Díaz
Recibido por Pascal Bécu el 2 de febrero de 2015
Fichero PDF por: Conciencia Nueva
Fuente: http: // messages.terrenouvelle.ca
© 2006-2015 – Tierra Nueva: www.terrenouvelle.ca: Publicado para ustedes por Amor... Para el Amor...
Pueden compartir este texto a condición de respetar la integridad y de citar la fuente.
No olviden, utilicen vuestro discernimiento con relación a estos textos. Tienen un Libre albedrío, entonces utilícenlo y sobre todo, escuchen lo que les dicta su corazón; él posee la verdad, déjenlo guiarles.
Recibido por Pascal Bécu el 2 de febrero de 2015
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Re-Publicado por “Isis Alada”
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