¿Porque nos pide el niño interior: juego y diversión, en pleno
proceso de ascensión?
Elsa Farrus
Elsa Farrus
Está demostrado, que una vida , no es solo lo que vivimos, es el
conjunto de su alimentación y su biorritmo Y esa alimentación, no solo es la
comida, son los cinco centros de alimentación: la comida física, la sexualidad,
el alimento motriz, el alimento intelectual y la conciencia emocional.
Cuanto más expandimos, estas cinco energías, más energía entra en nuestro ser………y se alarga nuestra vida física.
Por eso , en estos días de tantos cambios energéticos, al meditar
el niño interior, nos pide jugar, porque es la forma de salir de una vida
lineal, y sedentaria, en la que las decisiones las tomamos por los resultados,
para los resultados, y sin permitirnos, procesos abiertos o fallar, pues un
niño siempre experimenta, y no sabe que pasara con “su invento”.
Estamos en una época que hay mayor comida que nunca, pero esa comida, no tiene, espiral de ADN, que mueva al nuestro, o es transgénica, o es cárnica, sedentaria, con lo que hace una suma de ácidos en nuestro cuerpo físico.
Y con el proceso de Ascensión, necesitamos que los espirales
celulares, giren a mayor velocidad que nunca, para expandir nuestro cuerpo
físico, y que pueda entrar mayor capacidad de energía en él.
En cada nivel de vida, la naturaleza, tiene su propio orden o
geometría por ello, esta energía se abre en nosotros, y nos pide la expansión
celular para que podamos, caminar en unión a nuevas capas de conciencia y vida.
Y el hecho de hacer muchas actividades, que nos muevan emocionalmente y energéticamente, nos ayudan a crear una energía física, que contrarresta el sedentarismo y la pobre alimentación.
Los que aman la geometría, saben que el plano antiguo de la ciudad
de Praga, es visto desde el aire, un rosa, que está compuesta de pétalos con la
espiral aurea, en cada grupo de casas y calles. Esta ciudad de la rosa, es un
ejemplo de crecimiento por implosión, es decir de dentro a fuera, y en
crecimiento, por niveles.
Pues esa energía de las Rosas de sanación es la que debemos
restaurar ahora, por ello se nos pide volver a jugar, es decir diversificar,
hacer cosas nuevas, impensables, aunque no salgan como esperamos, o solo sirvan
para llorar o reír, pues todo ello abre la creatividad y desbloquea la
emotividad, y lo más importante no saca de la energía estancada, que tenemos,
al movernos solo por lo que hay que hacer, o lo que nos lleva a………………….
Lo que la ley de atracción no nos dijo, es que no solo hay que
desear algo o visualizarlo, para que se cumpla, hay que trabajar profundamente,
en mover la energía, para que podamos hacer los cambios necesarios internos y
que así la energía interna salga de dentro al exterior, y así atraiga en cada
uno de sus espirales, el exterior por magnetismo. Es un trabajo interno el
poder materializar el exterior, más afín a cada instante de conciencia.
Y para ello, es súper importante, la distensión, y el juego es la
base, de esa distensión, porque dejamos de hacer siempre lo mismo, hasta choca,
con la idea que perdemos tiempo, que no tenemos edad, etc….. es decir deriva
patrones emocionales, comportamientos y pensamientos.
Si no hacemos nada nuevo, no entra nada nuevo, es así de simple.
Me habéis oído hablar de la conciencia de icosaedro estrellado, del núcleo de Gaia, que suena a chino lo sé, en un lenguaje normal, diríamos que el icosaedro es la suma de miles de hilos de ADN, de todos nosotros, que son una red de energía en todo el planeta, y que ahora al estar conectado con la energía diamantina, aumenta la cantidad de energía que pasas por esos tejidos emocionales de todos nosotros, y a la vez las decisiones que tomamos nosotros lo aumentan a él.
El icosaedro rige la hidrosfera y las emociones humanas, por ello, estamos todos , tan emocionales, irascibles y con ganas de jugar y romper las barreras emocionales.
Y esta red icosaedrica, se une con la del dodecaedro, entrando en
unión a nuestro cristal interno, del chacra corazón-timo. En una nueva rejilla
humana de cristales vivientes, es decir, en seres vivos, que se aman y aman su
vida, y vibran, en expansión.
Porque la energía del dodecaedro, mueve y enlaza la biosfera y
nuestro ADN, eso hace que cuerpo emocional, cuerpo vivo y ADN, sean uno solo a partir
de ahora. Siempre lo fueron, pero con enlaces más pobres o distanciados, y
ahora su unión es total.
Cuando en dibujo técnico hablamos del punto cero, estamos hablando del
vacío total, donde todo puede ser creado de nuevo, y este punto cero, es el
chacra del corazón, y por ello el niño interior, a más energía entrante, más
quiere usar este punto cero, creando vida, inventos, juegos alegrías, pasiones,
experiencias. Quiere usar toda esa energía creadora en expandirse, en ser , en
vibrar, no en seguir siendo…………
Escuchémosle y creemos vida, el niño interior, que pide jugar, ya
no es un cuerpo emocional herido, es un sabio niño de luz, que ya sabe quién
es, y lo que le nutre. Y la ascensión es ahora, es real y es un regalo para
crecer, y comprender, quienes somos.
Feliz noche Elsa Farrus
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