YO SOY María que os
hablo.
Yo os saludo a todos
con el Amor de la Consciencia del Corazón que actualmente rodea y permea cada
vez más fuertemente a la Tierra. Vosotros estáis entre las primeras personas en
residir en esta Consciencia del Corazón y en trasmitirla a la Tierra y a las personas
que os rodean; y os agradecemos por eso. Aceptad nuestra gratitud por ser
canales para una Nueva Energía en la Tierra. Sois valientes, habéis hecho
la elección de estar aquí y ahora en la Tierra, en un tiempo en el cual muchas
cosas están cambiando para bien, pero también están surgiendo muchas cosas
dolorosas en la forma de viejas penas y heridas. En este tiempo están
saliendo a la superficie de manera extrema; y sí, también en ti. Todos
tenéis vuestra propia historia personal que viene desde hace mucho a lo largo
de muchas vidas.
Tú has estado en la
Tierra muchas veces; y cada vez has tratado de realizar alguna de tus
inspiraciones más profundas, lo cual es tu principal deseo para estar aquí en
la Tierra. Por causa de que estáis muy conectados con este Planeta, habéis
llegado aquí como "niños" que quieren crecer y aprender; y al mismo
tiempo, también sois un poco como "padres" para la Tierra, los
guardianes que con vuestra presencia nutrís la vida. Así que en vuestra relación
con la Tierra sois tanto "niños" como "padres". En este
momento del tiempo, la Tierra quiere llevaros a cruzar el puente hacia una
nueva consciencia, una nueva realidad, a vivir desde el corazón.
Al mismo tiempo, en la
esfera cósmica que rodea a la Tierra hay Ángeles y Guías que quieren apoyaros.
Mientras estamos junto
a vosotros, estamos muy conmovidos y os abrazamos espiritualmente. Sois muy
queridos para nosotros, porque sois los que estáis haciendo el trabajo, aquí y
ahora, en la Tierra. Sin embargo, aún tenéis muchas dudas con mucha frecuencia,
porque tenéis que contender con viejos temores. Habéis llegado al final de
una serie específica de vidas; estáis completando un ciclo. En las muchas vidas
que habéis tenido en la Tierra, gradualmente habéis hecho la transición desde
la consciencia egóica a la Consciencia del Corazón. Realmente la consciencia
egóica es una consciencia a la deriva, una consciencia que ya no sabe a dónde
pertenece ni de dónde viene. Es una consciencia escindida, separada y solitaria
en el Universo.
Por causa de esto, es
superada por el miedo; y a partir de ese miedo, el pequeño ego está tratando de
aferrarse a cierto control de la vida y sus alrededores. Vosotros también
tratasteis de hacer eso en vuestro largo viaje hacia la auto-realización. La consciencia
egóica es parte de ese ciclo, una fase de vuestra evolución. Sin embargo,
lo que sucedió durante la fase egóica dejó profundas huellas en vuestra
consciencia, porque hubo períodos en los cuales abusasteis del poder y del
control.
En vuestro viaje a
través del Universo, hubo un tiempo en el cual ejercisteis con demasiada
pesadez vuestros poderes de manipulación, con un efecto destructivo. La razón
por la que ahora menciono esto, es haceros conscientes de que por hacer esto
suprimisteis la vergüenza y la culpa; y el resultado es que ahora tenéis
dificultades para implementar completamente vuestra fortaleza.
Con la transición de
la consciencia del ego al corazón, viene el arrepentimiento por lo que
hicisteis en vuestro pasado; y tenéis la intención de nunca volver a hacerlo.
El resultado es que muchos vais demasiado lejos en la dirección opuesta, al
renunciar completamente a vuestra fortaleza y a vuestra confianza. Incluso
teméis a la idea misma de ser poderosos y confiados en el mundo.
Todos os habéis
convertido en "ratoncitos" que os ocultáis en los vericuetos de la
vida, porque tenéis esta resistencia a usar plenamente vuestra
auto-consciencia, por el temor de abusar de vuestro poder. En la larga
serie de vidas que habéis tenido en la Tierra, también hubo muchas ocasiones en
las cuales la consciencia y la Luz que queríais irradiar desde vuestro corazón,
se encontraron con incomprensión y resistencia; y esto incrementó vuestro
temor. El rechazo que experimentasteis os ha descorazonado.
Habéis experimentado
estos dos escenarios: Por una parte, un poderoso ego que era demasiado grande y
después os causó vergüenza y culpa; y por otra parte, haber expresado muy
amoroso poder desde el corazón, pero que no fue aceptado por la sociedad de la
cual formabais parte. Sí, habéis recorrido un largo camino. Habéis
experimentado los dos extremos; y por causa de eso, ahora vivís con los
remanentes del pasado, con la resultante pérdida de certidumbre: "¿Puedo
estar aquí? ¿Soy suficientemente bueno? ¿Qué me trajo aquí realmente? ¿Quién
soy para pretender levantar la cabeza?"
Quiénes sois, es de lo
que os quiero hablar hoy. Sois los Ángeles de la Nueva Era. Habéis venido a la
Tierra para abrir paso al Nuevo Tiempo; y venís en paz. Ya no venís
desenvainando la espada del ego, venís en paz. Ahora es el momento de volver a
asumir tu fortaleza y atreverte a creer en ti mismo.
Sí, tú eres ese Ángel
de paz, porque para ti el ciclo de las vidas ha llegado a la compleción: de la
oscuridad a la Luz, del ego al corazón; y ahora quieres abrazar la consciencia
basada en el corazón que es el resultado de toda esa experiencia. Quieres
compartirla con otros, porque sientes:
"Somos Uno. Todos
estamos juntos aquí en la Tierra; y todos somos parte de esa misma consciencia.
Sí, inclusive la Tierra misma es Una con nosotros". Y con toda vuestra
belleza; y con todo lo que habéis adquirido de riqueza interna, ahora estáis en
la Tierra listos para cruzar el umbral. ¡Ahora es vuestro tiempo! Pero
frecuentemente es como si tuviéramos que sacudiros suavemente para despertaros.
Siempre tenemos que manteneros enfocados en el paso que tenéis delante, pues
frecuentemente os ahogan las dudas de vosotros mismos.
Algunas veces sois muy
superados y atrapados por el mundo tridimensional que os rodea, por las cosas
que oís en las noticias de televisión y leéis en los periódicos. Los temores,
las cosas que la gente discute, todo lo que oís al respecto, lo que parece
imposible, lo que va a salir mal; todos estos mensajes negativos os deprimen.
Entonces dejas muy poco espacio para la Luz que realmente eres, la Luz que
tanto anhelas; y que tan poderosa e inconscientemente llevas dentro de ti.
Subestimas tu propia realidad, quien eres, la grandeza y el poder que
incorporas; y no en el sentido del poder de manipulación, sino del poder de la
Presencia Divina dentro de ti.
Lo que necesitas en
este tiempo es el correcto equilibrio del poder. No el poder del ego, sino el
poder de tu Yo Espiritual, de esa parte de ti que sabe que es llevada por una
Unidad que permea toda la Vida. ¡Si puedes volverte a sintonizar con ese poder;
y alinearte con él, aquí en la Tierra te sentirás en el Hogar, Uno con el
Espíritu, con el núcleo de quien eres! Eso es lo que estás buscando; y ése
puede ser el hilo que te guía para encontrar tu camino y tu destino en la
Tierra.
En la Tierra hay
cabida para todos vosotros; hay una abundancia que os está esperando, una
riqueza que quiere llegar a vosotros en forma de relaciones, agradables
condiciones de trabajo, una vivienda agradable, dinero. En todos esos niveles,
la Tierra y la realidad terrenal quieren recibirte.
Son tus dudas de ti
mismo las que te han mantenido atado y no han admitido esas cosas para
ti. ¡Te pedimos, casi que te imploramos, que creas en ti mismo; tú eres
eso! Sois los Pioneros de la Tierra, a quienes la Tierra ha estado esperando, a
quienes la Humanidad está esperando. A vosotros es a quienes estamos esperando,
porque no podemos hacerlo por vosotros. Podemos estimularos, una y otra vez; y
nunca nos cansamos de hacerlo; pero eres tú el que tiene que dar el paso
decisivo, confía realmente en tu corazón, en los susurros de tu
intuición.
Para ayudarte un
poquito en el camino; y sobre todo para estimularte, queremos llevarte al
futuro. Te pedimos que viajes con nosotros en tu corazón y en tu imaginación.
Imagina que estás allí, en esa Nueva Tierra; y que la consciencia basada en el
corazón se ha convertido en una realidad. Visualiza que lo fundamental de la
realidad terrenal es la paz y la alegría.
Imagina que estás en
una casa situada en un bello escenario natural. Es tu casa, tu residencia; y
toda la materia se siente como si estuviera viva. Sólo mira alrededor de ti:
los muros, las ventanas, el techo de la casa, siente que están más vivos que lo
que solías sentir en la materia terrenal. Todo es luminoso e irradia Luz; y la
Luz no proviene del Sol, la Luz sale de la materia misma. Mírate en esa
casa. Tu cuerpo también tiene esa cualidad luminosa. Las células de tu
cuerpo se sienten radiantes, vitales, puras y limpias. Y tienes vestidos muy
cómodos que fluyen deliciosamente alrededor de ti.
Estás sentado en el
piso de esa casa; y desde tu Chakra Raíz sientes la profunda conexión con la
Tierra. Sientes el misterio de la Tierra y de la vida que proviene de la
Tierra, pues tú eres parte de esa vida. Naciste en el Cosmos, pero ahora eres
parte de la Realidad Terrenal; y te conectas con estos dos
elementos. Luego te levantas para salir. Quizá haya una puerta, o quizá
sólo una abertura; y estás sobre la Tierra con los pies descalzos. El Sol es
brillante; y el cielo azul; y por un momento sientes la energía del Sol.
También parece como si el Sol se sintiera diferente: una brillantez, un
resplandor, una libertad que no estaban antes allí; y tu corazón late con
alegría.
El nuevo nacimiento ha
tenido lugar; y te sientes tan feliz que tienes el deseo de celebrarlo con
otros. Eres consciente de que tus pies te llevan a un lugar donde están
reunidas otras personas. Allí, cerca, hay un lugar abierto, quizá una plaza; y
vas a donde oyes el sonido de las voces. Allí ves los rostros de personas que
te sonríen y te dan la bienvenida: "Te hemos estado esperando",
dicen. "Sin ti no estamos completos". Estás entre ellos y te
sientes incluido de una manera tranquila, gentil, pacífica. Tú eres simple y
completamente tú mismo; no necesitas ser diferente de cómo eres; tú eres tú
mismo y te sientes conectado. Cuando todos os sentáis en ese lugar, todo
se aquieta, todos estáis escuchando.
Llega un mensaje: Es
necesaria vuestra ayuda. Os llega un llamado de la vieja Tierra. Es la Tierra
que aún está atrapada en la vieja consciencia, la Tierra de la que aún eres
parte, mientras te sientas aquí; es la Tierra que quiere volver a
nacer. Desde el futuro enviáis vuestra energía a esta vieja Tierra, a su
vieja realidad de consciencia basada en el temor, que está en medio de un proceso
de nacimiento con dolorosas contracciones. Enviáis vuestra confianza, vuestro
conocimiento, vuestro valor, a esa vieja realidad y a vosotros mismos mientras
ahora estáis sentados aquí.
Retorna al presente y
recibe esa energía del futuro; y permítele que te bañe como una ducha. Esa
libertad en la cual puedes ser verdaderamente quien eres, ya no está tan lejos.
Siéntete apoyado por tu propio Yo Superior; y pídele consejo. ¡Pregúntale a tu
Yo Futuro, el cual ya existe, realmente quién está vivo dentro de ti! El tiempo
no existe; es una ilusión. Ahora puedes conectarte con ese Yo que ha terminado
el proceso de nacimiento. Mientras sostienes en tu corazón la vibración de
tu Yo Futuro, habrás dejado atrás los viejos temores, el viejo dolor de tu descenso,
todas esas luchas. Ahora puedes celebrar la vida. Ahora puedes dar la mano a
otros y pasarles los bellos dones que tienes para compartir.
¡Y realmente puedes
compartirlos ahora! Imagina que tu Luz, tus cualidades únicas, tu belleza; todo
ello, está circulando en este recinto. Tú las irradias hacia afuera y las
personas que están aquí son afectadas por ello; y por causa de ello su Senda se
hace más fácil.
Permite que sea;
permite que la sabiduría que es tuya fluya a través de tu cuerpo: a través de
tu corazón, a través de tu vientre, a través de tu Chakra Raíz. Recibe del
Cielo, recibe de la Tierra; recibe del Futuro la ayuda que hay allí para
ti. Y cuando sientes la luminosidad que eso conlleva, entonces es
verdaderamente benéfico.
Entonces te has conectado
con quien eres, con tu núcleo más profundo. Y eso es todo lo que necesitas
hacer para encontrar tu camino en la vida:
Conectarte con esa
Luz, esa simplicidad, esa facilidad. Lo que fluye libremente es lo que es
benéfico. En esencia, la vida no es difícil.
Tú eres un canal; a
través de ti fluyen sabiduría y Luz; y cuando quiera que permitas la conexión
con la Tierra; y compartes tus dones con otros, traes cambios a este Mundo,
mientras al mismo tiempo te liberas de él. Tú dejas ir, pero tras de ti dejas
una huella para otros, porque llegará el día en el cual ellos también querrán
abandonar la consciencia basada en el temor. Con tu energía estás dejando
huellas. Consecuentemente, felicítate y siéntete orgulloso.
No mires las cosas que
aún quieres lograr. Mira todo lo que ya has hecho; y lo que has superado en ti
de emociones, de temor, de limitación. Siéntete orgulloso de estar
encarnado en un Cuerpo Humano mientras percibes la promesa del amanecer de una
Nueva Realidad, tanto interior como exterior.
Diste el salto con fe.
¡Eso es testimonio de tu valor y tu fortaleza! Consecuentemente, atrévete a
dejarte guiar por tu corazón en tu vida diaria; y toma decisiones que
correspondan con la energía que ahora sientes, con la luminosidad de la Nueva
Tierra. No vayas en contra de lo que tu instinto te dice, atrévete a
confiar.
Nosotros te amamos,
siente nuestra presencia.
Por Pamela Kribbe
Tradujo: Jairo
Rodríguez R.
Editado por Tony
de Pablo
No hay comentarios:
Publicar un comentario