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miércoles, 7 de agosto de 2019

¿Cómo salir del ciclo de violencia? JOPHIEL ARCHANGEL transmitido por Alain Titeca



¿Cómo salir del ciclo de violencia?

JOPHIEL ARCHANGEL

Queridos hijos de Gaia, hola a todos, soy Jophiel, el arcángel de guías, terapeutas e instructores. Mi rayo amarillo lleva el conocimiento siempre que permitas que invada tu ser. Vengo a hablarte hoy sobre uno de tus viejos embalajes que aún hoy te encierra. Para cambiar sus interrelaciones, debe liberarse de la violencia. Estos comportamientos violentos pueden infiltrarse en el corazón de sus relaciones más íntimas. Vengo a usted hoy para sugerir formas de salir de la violencia doméstica.
La violencia es una de las plagas de la humanidad. La violencia es la caída del lenguaje, escribió el filósofo. Es sobre todo un remedio final para el hombre que no expresa lo que siente. El comportamiento violento termina el intercambio y el intercambio. La violencia es un retiro que le permite al autor garantizar su seguridad interior al fortalecer su zona de confort. Nada justifica la violencia. Estos comportamientos violentos pueden tomar diferentes formas según las situaciones y los individuos. La violencia puede ser psicológica, física, sexual. Las manipulaciones también son de gran violencia.
Al establecerse en sus relaciones, uno de los cónyuges generalmente está bajo la influencia del otro mientras alimenta la dinámica de la violencia a través de sus comportamientos, actitudes, creencias y aceptaciones. Salir de este modo de relación a menudo es complicado tanto para la víctima como para el perpetrador. Esto supone un cambio de valores y creencias. Entonces, es esencial que cada uno de los protagonistas alinee sus comportamientos con sus nuevos valores para redefinir su zona de confort. La negación de la violencia a menudo constituye una gran resistencia a la evolución de la situación relacional. Por lo tanto, se trata de aceptar la situación tal como es y luego integrar progresivamente el cambio corporativo y enérgico. Este último punto constituye el segundo obstáculo importante para el cambio. De hecho, la violencia es una de las manifestaciones, una de las expresiones de ira. Pero esta ira es para muchos una tremenda energía para actuar. Para salir de la ira, debes aprender a alimentarte con otra energía. La del amor también es de gran fuerza, además es mucho más constructiva que la de la ira. La violencia doméstica sigue un ciclo que puede resumirse por la manipulación, la agresión y la reacción de la víctima. La del amor también es de gran fuerza, además es mucho más constructiva que la de la ira. La violencia doméstica sigue un ciclo que puede resumirse por la manipulación, la agresión y la reacción de la víctima. La del amor también es de gran fuerza, además es mucho más constructiva que la de la ira. La violencia doméstica sigue un ciclo que puede resumirse por la manipulación, la agresión y la reacción de la víctima.
Para salir de este ciclo, la víctima debe desarrollar una conciencia de su integridad. En cuanto al autor, tiene que renunciar a la energía de la ira, es decir, su necesidad de poder, frustración y culpa. Al hacerlo, tiene que aprender a alimentarse de la energía del amor. Cabe señalar que este trabajo es más fácil cuando la separación es efectiva. Sin embargo, si ambos cónyuges están listos para el cambio, el proceso puede tener éxito y transformar la realidad de la pareja. Ambos cónyuges deben tomar el camino del respeto que los llevará a reconocerse en todas sus diferencias. También tienen que entrar lenta pero seguramente en el perdón de su propio comportamiento y, finalmente, es necesario que cada uno reconsidere su ego.
Los egos son generalmente una fuente de conflicto más allá del trabajo que cada cónyuge tiene que hacer. Es esencial comprender que tanto los perpetradores como las víctimas de violencia doméstica son grandes adictos emocionales, necesitan que exista el otro. Para abandonar el ciclo de violencia, es necesario salir de la dependencia emocional. La violencia es un remedio final cuando el sujeto no puede contactar y expresar sus emociones.
Queridos hijos, su planeta Gaia continúa su vibración ascendente. Su sistema está en una fase de transición. Entre dos eras, dejas la de los peces para entrar en la de Acuario. La frecuencia vibratoria del planeta es hoy lo suficientemente alta como para permitirte abandonar la energía de la ira y establecerte en la del Amor. Sin temores ni remordimientos, este pasaje fue necesario para que crecieras. Queridos hijos de Gaia, los invito a que renuncien a toda culpa, a enviarles Amor y a contactar con Gratitud.







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