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viernes, 4 de julio de 2014

LA VERDAD DEL MATRIMONIO



Quisiera llamarles la atención hoy, amados Míos, y también la de los mayores, en esta atmósfera serena, a la verdad concerniente al matrimonio. En las Octavas de Luz, no existe el dar en matrimonio.
Solo en la octava humana se cometen los errores del matrimonio humano. No es que sea menester que el matrimonio deba cesar en la octava humana, pero quienes comprenden la presencia de Vida deberían invocar pidiendo sabiduría para que los dirija, de manera que no se cometan errores. La sabiduría de su Magna presencia YO SOY” los dirigirá. Si su corriente de Vida requiere de la asociación de otra, el individuo correcto será traído a ustedes, quien será armonioso. Luego, esto podrá intensificar la Luz de su com­pañero y la suya propia a la Perfección de ambos.
Tenemos que hacer lo detallado a continuación, más claro y firme en cada clase. Cuando la gente entra a esta Enseñanza -tanto gente joven como mayor- y después de toda una vida de gran inarmonía, comienzan a sentirse armoniosos entre sí, no vayan a malinterpretar esa armonía como un deseo de compañía humana. Un gran número de los estudiantes a menudo lo han mal interpretado como tal. A veces eso podrá ser verdad, pero asegúrense de que lo es antes de dar ese paso.
Por Favor escúchenme -esto es lo más vital entre los estudiantes de la humanidad hoy en día. El Matrimonio en su Pureza en la octava humana es algo magnífico; pero el matrimonio por deseo humano es una tragedia como todos ustedes lo saben muy bien. Los Estudiantes del “YO SOY” de la actualidad no están sujetos a esas condiciones, si tan solo esperan e invocan fervorosamente a la “Magna Presencia YO SOY” pidiendo que Su Sabiduría los dirija.
Si tal condición parece aparente en la propia vida, el individuo debería invocar fervorosamente y esperar hasta estar seguro; entonces no podrán cometerse errores. Esto hará más para estimular a otros miembros de la humanidad a entrar a la Gloria de esta Gran Verdad de Vida, que quizás cualquier otra cosa.
Extraído del libro La Voz del Yo Soy (vol.4)








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