El propósito sagrado de la Vida.
El viaje de Dios a Dios es un
arco que retrocede en espirales.
Todos nosotros estamos buscando
nuestro propósito sagrado.
Un pista podría ser buscar una
actividad que realmente amemos. Salí a
tomar un café con una amiga y no podía esperar a volver a casa para retomar el
trabajo en el libro sobre la Ley Universal. Me preocupó que pudiera estar
siendo maleducado con mi amiga, como si se tratara de ella cuando no era así.
Eso definitivamente apunta a que
trabajar en dicho libro es parte de mi propósito sagrado.
Eso se relaciona a mi propósito
sagrado. Pero, ¿y qué pasa si la vida misma tuviera un propósito sagrado? ¿Cuál
podría ser el propósito sagrado de la vida?
***
En mi visión depende del punto
de vista desde el cual hablamos- del punto de vista de la chispa de Dios
individualizada o desde el de Dios Mismo (Dios va más allá del género) (1).
El propósito de Dios de crear la
ilusión de Seres Individuales era que Dios pudiese encontrar a Dios en un
momento de nuestra Auto-Realización.
Nos daríamos cuenta que nosotros
somos Dios y, que en el momento del reconocimiento o iluminación, Dios estaría
teniendo el placer de encontrarse a Sí Mismo.
Todo este drama de la vida fue
inventado con un solo propósito. Es una obra divina o “leela.”
Aquí tenemos la trama de la
película: chispas de Dios desconocidas se mueven desde la Inconsciencia a la
Auto-Consciencia. En raras ocasiones, la chispa se entiende a sí misma y Dios
se encuentra con Dios. En Technicolor y Visión Interna.
***
Apuesto a que ya adivinaron cual
es nuestro propósito sagrado.
Nuestro propósito sagrado es
darnos cuenta de nuestra verdadera identidad. Esa identidad verdadera es Dios.
Si Dios es todo, ¿Cómo podría la
situación ser diferente? Si Dios es todo y nosotros somos “algo”, entonces
debemos también ser Dios. Incluso cuando vemos que no somos una cosa, seguimos
siendo Dios.
No hace ningún bien, en términos
de producir un resultado-Auto-Conocimiento- simplemente saber eso como una
idea. Yo soy Steve Beckow. Vivo en Vancouver. Me gano la vida escribiendo
libros. No hay ningún poder en nada de esto.
No hace ningún bien simplemente experimentar quienes
somos. Siento la profunda paz que soy. Me siento elevado en este momento.
Agradable, pero de nuevo es muy poco poder para transformar (2).
La única cosa suficiente para
galvanizarnos en la acción,y decidir algo de una vez por todas-en otras
palabras motivarnos y causar real transformación- es la realización. Debemos
darnos cuenta de nuestra verdadera identidad.
Y como puedes esperar, hay
distintos niveles o profundidades dentro de esa realización.
Puedo obtener un simple ¡Ajá! El
cual puede ser suficiente para calmar una inquietud, pero no suficiente para
motivar un cambio en el comportamiento.
O podría darme cuenta de mi
Unicidad sagrada con Dios.
Cuando aceptamos lo anterior, y
aceptamos que todo lo que existe y lo que no existe es Uno con Dios,
ascendemos.
Algún tiempo después de eso, nos
encontramos siendo capaces de satisfacer todas nuestras necesidades- sin
necesitar dinero. Imaginamos lo que deseamos y nuestros pensamientos crean el
objeto. Lo que nosotros llamamos “imaginación”, los Seres Elevados le llaman
“pensamiento creativo”.
La vida definitivamente se está
moviendo en la dirección de incrementar la habilidad de trabajo.
Súmenle a eso que pasamos cada
día en la Dimensión Elevada experimentando un amor tan poderoso que limpia toda
la miseria y ansiedad y nos deja con la experiencia de completa satisfacción de
la vida. ¿Qué parte de esto no suena maravilloso?
Hay muchas otras formas de
ascender; no digo lo contrario. Pero el logro de Sahaja Samadhi-la etapa
después de darnos cuenta que somos Dios, la etapa en que vemos que Dios se ha
convertido en todo- es, según yo entiendo el acto final en nuestra Ascensión
Gradual.
Esa es la meta. Es ahí donde
vamos.
***
En 1987, vi en una visión a una
sola chispa de Dios dejar el Sol Dorado que el Santo Padre era y viajar a
través del espacio al dominio nuboso de la Madre Divina.
La miré viajar a través de un
tubo espiral que sabía que representa múltiples vidas en la materia. Mientras
estuvo en el tubo, su brillo la dejó.
Sin embargo la vi experimentar
un flash de iluminación y después se apresuró a casa para fusionarse con el Sol
Dorado de nuevo (3).
Mientras que sabía que esta
película espiritual representa la suma de todas nuestras vidas en la materia,
parece ser apropiado, con los cambios apropiados, a una parte del viaje-
nuestra Ascensión.
Descendemos a la Tercera
Dimensión de materia, mater, Madre. Hemos viajado a través de nuestras vidas en
materia y ahora estamos en el umbral de las realizaciones que nos llevaran gradualmente
y últimamente a una dimensión más allá de la Tercera- la Quinta o más alta- de
la consciencia humana.
Estas realizaciones serán sobre
quienes somos o sobre nuestra relación con Dios (Unicidad).
Mientras no nos fusionemos con
Dios y dejemos nuestras individualizaciones atrás, vamos a experimentar un
nivel mucho más profundo de Unidad con Dios.
El mismo viaje desde un nivel de
oscuridad y densidad a uno de mayor Luz y liviandad aplica en ambos casos.
Lo que esto significa es que la
Ascensión, una vez lograda, no termina nuestro viaje. Solamente retornamos a
casa.
La última información en la que
solía apoyarme sugiere que, incluso cuando terminamos la ronda de encarnaciones
en la Doceava Dimensión y retornamos a Casa, somos enviados de nuevo, renovados
y con una tarea fresca.
Notas de pie de página.
(1)
Los
humanos han- o Padre/Madre Dios- implementado una metáfora de género como un
elemento de enseñanza. Aquí hay un ejemplo de Lao Tzu usándola:
“Sin Nombre es , de hecho la
fuente de la creación. Pero las cosas tienen una madre y ella tiene un nombre”.
(Lao Tzu, The Way of Life. The Tao
Te Ching. trans. R.B. Blakney. New York, etc.: Avon, 1975, 53.)
La distinción no tiene nada que
ver con las ideas humanas del género. Es entre el amor y el movimiento (la
Madre) y el amor en reposo (el Padre). Si el movimiento fuese a cesar en le
multiverso, el sueño se acabaría. Todo se desintegraría en la nada y retornaría
al Padre.
(2)
Cuando
hacemos un cambio simple en nuestro comportamiento como resultado de una idea o
experiencia- eso es un evento al nivel intelectual o emocional- yo uso la
palabra “cambio” para eso.
Cuando hablamos de una
alternación en la orientación interna que ocurre en el medio o despertar de una
realización, uso la palabra “transformación”.
La transformación es más
profunda, más duradera, impacta a niveles más internos. Nosotros raramente
olvidamos una realización o la transformación que resulta de eso.
(3)
Ve “The
Purpose of Life is Enlightenment – Ch. 13 – Epilogue,” at http://goldenageofgaia.com/2011/08/13/the-purpose-of-life-is-enlightenment-ch-13-epilogue/
Esto no fue una experiencia de
iluminación, simplemente fue una visión. Yo no me di cuenta de nada, sólo lo vi
como una película desplegándose frente a mí.
En esta ocasión, a diferencia de
muchas ocasiones futuras, sentí una tremenda alegría y eso es lo que me
permitió “saber” lo que estaba pasando frente a mis ojos.
Podría haber sido una
experiencia truncada. Tuve el entendimiento intelectual más la alegría, pero
menos la realización.
Traducción y colaboración para “Isis Alada” por cortesía de Javiera
Balbontin mail ( javibalbontin@gmail.com)
INGLÉS
The
Sacred Purpose of Life October 15, 2017 By Steve
Beckow
The journey from God to God is an
arc that spirals back
We’re all of us looking for our sacred purpose.
A clue might be to look for some activity that we
reaaalllyy looooove.
I was out having coffee with a friend and I couldn’t
wait to return home to get back to work on the universal-law book. I worried
that I’d seem rude to my friend, as if it was about her when it was not.
That definitely points to work on the book being part
of my sacred purpose.
That relates to my sacred purpose. But what if life
itself had a sacred purpose? What might the sacred purpose of life be?
***
In my view, it depends on whose viewpoint we’re
speaking from – from the viewpoint of the individuated spark of God or from
that of God Itself (God is beyond gender). (1)
God’s purpose in creating the illusion of individuated
selves was that God would meet God in a moment of our Self-Realization.
We’d realize that we are God and, in that moment of
recognition or enlightenment, God would have the great pleasure of meeting
Itself.
This whole drama of life was made up for that singular
purpose. It’s a divine play or leela.
Here’s the plot of the movie: Unknowing sparks of
God move from unconsciousness to Self-Consciousness. On rare occasions, a spark
“gets itself” and God meets God. In Technicolor and InnerVision.
***
I’ll bet you’ve already guessed what our sacred
purpose is.
Our sacred purpose is to realize our true identity.
That true identity is God.
If God is everything, how could the situation be
otherwise? If God is everything, and we are “some thing,” we must also be God.
Even when we realize we are no thing, we remain God.
It does no good, in terms of producing the result –
Self-Knowledge – to simply know that as an idea. I am Steve Beckow. I
live in Vancouver. I write books for a living. There’s no power in any of this.
It does no good to simply experience who we are.
I feel the deep peace that I am. I’m feeling uplifted at the moment. Nice, but
again very little power to transform. (2)
The only thing sufficient to galvanize us into action
and decide a question once and for all – in other words, motivate us and cause
real transformation – is realization. We must realize our true
identity.
And, as you might expect, there are also depths or
levels of realization.
I can have a simple “Aha!” which may be enough to
settle a question, but not enough to motivate a change in behavior.
Or I could realize my sacred Oneness with God.
When we realize the latter, and realize that
everything that exists and does not exist is also One with God, we ascend.
Some time after that, we find ourselves becoming able
to satisfy all our needs – without needing money. We imagine what we want and
our thoughts create the object. What we call “imagination,” higher-dimensional
beings call “creative thought.”
Life is definitely moving in the direction of
increasing workability.
Add to that that we pass every higher-dimensional day
experiencing a love so powerful that it sweeps away all misery and anxiety and
leaves us with the experience of complete satisfaction with life. What of this
does not sound wonderful?
There are many other ways of ascending; not saying
otherwise. But attainment of Sahaja Samadhi – the stage beyond
realizing we are God, the stage where we see that God has become
everything – is, as I understand it, the final act in our
otherwise-gradual Ascension.
That’s the goal. That’s where we’re headed.
***
In 1987, I saw in a vision a single spark of God leave
the Golden Sun that the Holy Father was and travel through space to the cloudy
domain of the Divine Mother.
I watched it travel through a spiral tube that I knew
to represent lifetimes in matter. As long as it was in the tube, its brilliance
had left it.
However I saw it experience a flash of enlightenment
and then it raced home to merge with the Golden Sun again. (3)
While I knew this spiritual movie to represent the sum
of all our lifetimes in matter, it can be seen to apply, with appropriate
changes, to one leg of the journey – our Ascension.
We descended into the Third Dimension of
matter, mater, Mother. We’ve traveled through lifetimes in matter and now
stand on the threshold of realizations that will carry us, gradually and
ultimately, into a dimension beyond the Third – the Fifth or higher – of human
consciousness.
These realizations will be either of who we are or
else of our relationship to God (Oneness).
While we won’t merge with God and leave individuation
behind, we will experience a much-deeper level of Unity with God.
The same journey from a degree of darkness and
denseness to one of greater Light and lightness applies in both cases.
What that means is that this Ascension, once
accomplished, does not end our journey. Ultimately we return Home.
Later information than I used to rely on suggests
that, even after we finish the Twelfth-Dimensional human round of incarnation
and return Home, we’re sent back out again, renewed, and on a fresh assignment.
Footnotes
(1) Humans have – or Mother/Father God has – employed
a gender metaphor as a teaching device. Here’s an example of Lao Tzu
using it:
“Nameless indeed is the source of creation. But things
have a mother and she has a name.” (Lao Tzu, The Way of Life. The Tao Te
Ching. trans. R.B. Blakney. New York, etc.: Avon, 1975, 53.)
The distinction has nothing to do with human ideas of
gender. It’s between love in motion (the Mother) and love at rest (the
Father). If movement were to cease in the multiverse, the dream would be
over: Everything would dis-integrate into nothingness and return to the Father.
(2) When we make a simple change in behavior as a
result of an idea or experience – that is, an event at the intellectual or
emotional level – I use the word “change” for that.
When we talk about the shift in inner orientation that
happens in the midst or wake of a realization, I use the word “transformation”
for that.
Transformation is deeper, more lasting, more
profoundly impactful. We seldom forget a realization or the transformation that
results from it.
(3) See “The Purpose of Life is Enlightenment – Ch. 13
– Epilogue,” at http://goldenageofgaia.com/2011/08/13/the-purpose-of-life-is-enlightenment-ch-13-epilogue/
This was not an enlightenment experience, but simply a
vision. I did not realize anything; I watched a visual tableau, like a movie,
unfold before me.
On this occasion, unlike on many future occasions, I
felt tremendous bliss and that’s what allowed me to “know” what was happening
before my eyes.
It may have been a truncated experience. I had the
intellectual understanding plus the bliss but minus the realization.
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