Vídeos sobre las operaciones de las Fuerzas de la Luz

Operación Omega Phoenix.

Lineamientos estratégicos del Movimiento de Resistencia.
Una operación bendecida por la Diosa.

El Movimiento de Resistencia tendrá su propio rol al momento del Evento, y a esto se le conoce como operación Omega Phoenix.
Al momento del Evento, un cierto número de operativos del Movimiento de Resistencia saldrán de sus bases subterráneas hacia la superficie. Estos hombres y mujeres estarán vestidos con ropas de civiles, y no uniformes policiales o militares.
Ellos monitorearán el proceso de arrestos masivos y asistirán a la milicia positiva y a la autoridad civil en los arrestos.
Los miembros del Cabal que sean arrestados por los operativos del Movimiento de Resistencia serán llevados a lugares clasificados.
Éstos criminales serán llevados después a manos de la milicia positiva y las autoridades civiles.

La única excepción a este escenario de arrestos masivos son miembros del cabal que han cometido acciones criminales extremas en contra de la humanidad a lo largo de los siglos.
El alcance de sus crímenes se extiende más allá de este planeta. Estos individuos deben presentarse ante la Corte Galáctica. Muchos de ellos serán regresados a la Tierra para que la humanidad decida su destino, pero una fracción de estos seres será llevada inmediatamente al Sol Galáctico Central para reestructuración.
A los militares positivos ya se les ha comunicado la Operación Omega Phoenix y están de acuerdo con ella.

La Corona de San Esteban

“No buscaban una corona para un monarca, sino que buscaban a un Rey para la Corona.”
-Péter Révay
La Nueva atlántida es un proyecto de las fuerzas de la Luz que fue revelado a la humanidad por medio del Conde de St. Germain durante su encarnación como Francis Bacon.
Su propósito es establecer una sociedad utópica en la tierra, basada en la meritocracia.
Esto se logrará reviviendo la antigua red de Luz de la era dorada de la atlántida mediante la activación de ciertos artefactos de poder y distintos vórtices alrededor del globo.
La Corona de San Esteban, conocida en hungría también como la Santa Corona de Hungría es uno de esos artefactos. Esta fue la corona de coronación que usó el imperio húngaro durante casi toda su existencia.
Estaba relacionada con las Tierras de la Corona Húngara, las cuales se extendieron al imperio austro-húngaro a lo largo de la historia.
Esta corona tiene una fuerte conexión con el sistema estelar Sirius, y ahora está siendo activada bajo la sabia guía del Maestro St. Germain. Es un talisman de poder que transmite energías del sistema estelar Sirius hasta este planeta, fortaleciendo la red energética de Luz de la Tierra.
También contrarresta los efectos de los artefactos negativos que cayeron en manos de los operativos del Grupo Quimera, como la Piedra Negra.
La Corona de San Esteban también asiste a los Templarios Positivos en su lucha contra el Cabal y su plan para destruir Europa.
Desde el año 2000 la corona se mantiene en exhibición en el Salón del Domo central en el parlamento húngaro, bajo el cuidado de la Nobleza Blanca y los Templarios Positivos del anterior Imperio Austro-Húngaro.
Ningún rey de Hungría era considerado como tal sin haber sido antes coronado con la Corona de San Esteban. En la historia del Imperio, más de 50 monarcas fueron coronados con ella: Desde su primer rey, Esteban I de hungría, quien fue coronado el 25 de Diciembre del año 1000 DC, hasta el último rey en 1916, Carlos IV, el último rey del imperio austro-húngaro.
El campo energético de la Corona ha sido santificado por siglos y ahora está liberando su poder bajo la guía de Autoridades Superiores. También es un importante nodo de poder sobre la superficie de la Tierra y considerado como una reliquia en los reinos de Luz.
¡Amor Vincir Omnia!

Petit Trianon

Otro importante lugar de poder que ha sido activado es el Templo del Amor cerca de Petit Trianon.
El gabinete de espejos móviles en el edificio Petit Trianon es el lugar donde los verdaderos misterios Atlantes de la Diosa fueron anclados por primera vez en la superficie de la tierra, en 1776 por la Princesa de Lamballe y María Antonieta siguiendo las instrucciones del Comte de Saint Germain:
Cobra