Kryon habla sobre el Innato y la Intuición
Saludos, queridos, Yo
Soy Kryon del Servicio Magnético.
Hoy quiero darles alguna información sobre algo que
tienen todos ustedes, y que está empezando a cambiar. A lo largo de todos estos
años de información, de canalización, de hablar de lo que vendrá, de cómo los
afectará, de qué pueden hacer, las buenas noticias de todo esto,
continuamos.
Hemos discutido con ustedes lo que es su Innato, y hay
algunos, tanto en el salón como escuchando, que no pueden realmente identificar
lo que realmente quiere decir esa palabra; qué es el Innato. Comprenden la idea
de que el Innato tendría que poder hacer ciertas cosas, pero ustedes no pueden.
De modo que Innato ha sido el nombre que le dimos a su
cuerpo inteligente. La idea es que estás tú y luego está el tú dentro de ti que
es más inteligente que tú. Se llama Innato y tú accedes a él por medio de
muchos procesos a través de los años.
Uno, el más popular, es la quinesiología, llamado
testeo muscular; hay otros que literalmente entrevistan al Innato. Ahora
bien, te hemos contado que el Innato, el cuerpo inteligente, está conectado con
cosas dentro y fuera de ti que son grandiosas. No es en absoluto una función
cerebral, sin embargo el cerebro tiene que involucrarse, como siempre lo hace.
Pero están involucrados la pineal, el corazón, la triada.
El Innato está en contacto - más que tú - con tu Yo
Superior y... tu registro akáshico. Eso es lo que hace tan inteligente al
Innato. Podrías decir que es el instinto que los humanos no tienen y los
animales sí. Eso es el Innato.
Las cosas por las que el Innato es responsable son
grandes y grandiosas, y la lista te sorprendería. Por eso es que hay tanto
involucrado con procesos para entrar en contacto con el Innato. El pensamiento
de que dentro de ti hay un cuerpo inteligente que sabe lo que tú no sabes.
Imagina tener que preguntarle a tu cuerpo a qué eres alérgico. ¿No tendrías que saberlo? Entonces haces testeo muscular para averiguarlo. Así de alejado
estás en este momento, ser humano, de poder discutir mano a mano con el Innato.
Y si pudieras, ¿cuál sería el idioma
que tendrías para entenderte con el cuerpo inteligente?
Digamos que puedes abrir una puerta hacia él. ¿Cuál sería el idioma? ¿Cómo se sentiría? Te diré, querido: se llama intuición. Les describo una imagen. El niño
está allí y está a punto de tocar la estufa. ¿No es interesante que el niño incluso quiera tocar la estufa? El niño está al borde de un precipicio y está a punto
de seguir caminando hasta que un adulto lo retiene. Un animal no haría eso. El
animal sabría sobre alturas, y sobre gravedad; en el animal eso viene con
el territorio de la vida. Un animal no tocaría una estufa caliente, aunque no
supiera que eso es una estufa. Percibe el calor, que le dice que se aparte; el
bebé humano no. Viene completamente ignorante de algunas cosas que el
Innato le diría si estuviera en contacto. De modo que el niño toca la estufa,
se quema el dedo un poco, y dentro del cerebro del niño hay una actividad que
permanece siempre. Sinapsis, neuronas, crecimiento complejo que ocurre y graba
en el cerebro del niño: No toques una estufa. Y eso quedará allí toda su vida.
Si lo piensan, ¡eso es profundo! Una acción, quemarse el dedo, perdura para
siempre en la vida.
Después el niño fallece, y luego vuelve y otra vez
quiere tocar la estufa. Hay una desconexión, queridos, en el ser humano de lo
que en el mundo animal se llama instinto. No recibe las cosas que ha aprendido
en su vida pasada. Este es uno de los argumentos que daría la ciencia para la
no existencia de vidas pasadas. Ellos dirían que si has tenido una vida
anterior, tendrías que saber. Lo que no entienden en este punto es que en la
vieja energía el ser humano no está plenamente funcional. Les hemos dicho
esto antes: ustedes están funcionando aproximadamente al 35%, está
empezando a aumentar, pero en una escala desde 1 a 100 solo han recorrido un
tercio del trayecto en lo que se refiere a sabiduría, equilibrio, inteligencia,
intelecto. Hay intelectuales que lo discuten y dicen “Podemos pensar en cualquier cosa.” Les digo: no, no pueden; no saben lo que no
saben. Un intelectual tocaría el techo con lo que él puede pensar, hasta
que este planeta empiece a crecer; la consciencia empieza a cambiar y
transformarse, y una de las cosas que ustedes van a anhelar, queridos, y ya lo
dijimos antes, es la recordación akáshica. Pero más que eso: hablemos de cómo
el Innato va a ser heredado por medio de su akash.
Ahora hablo de dos partes: una es sobre los nuevos
niños que nacen en el planeta, y la otra es lo que pueden hacer las almas
antiguas en el planeta ahora mismo, si salen de su caja de creencia que dice
que no pueden.
Herencia akáshica - hemos usado esa palabra antes - ,
recordación akáshica; pero deben saber que lo que empieza a suceder con los
niños, con ustedes, con todos los que escuchan, a medida que empiezan a
evolucionar en el planeta, como lo están haciendo, van a recibir más
intuición. En otras palabras, ese idioma de comunicación con el Innato va a
aumentar. El cuerpo inteligente comenzará a soltar información: el niño no
tocará la estufa; no se acercará al borde del precipicio. Esto es importante,
porque ustedes comenzarán a verlo y se preguntarán cómo el niño sabía.
Quiero llevarlos en un viaje. Es el ser humano,
representado metafóricamente - como lo hacemos a veces - por una casa. Vives en
esta casa, ser humano, es hermosa, la haces como quieres, bellos decorados en
las paredes, ¡es elegante! Es suave. Es donde puedes tener un altar, donde
meditas, eres tú. Es hermosa. Es donde duermes, donde comes. Pero el
centro de esta casa siempre te está oculto. El centro es una habitación,
y en esa habitación está el ser humano real, el inteligente, el Innato. De modo
que lo que haces es vivir alrededor del Innato. Y en esa habitación central, se
podría decir, tendría que haber algunas puertas para entrar al centro de esa
área. Y las hay. Y empiezas a usarlas, pero no se abren hacia afuera, no
se puede tirar de ellas hacia uno, tienen que ser abiertas por el cuerpo
inteligente de adentro. Unas pocas no son puertas en absoluto, son pequeños
agujeros en las paredes. Uno de esos se llama quinesiología. Puedes
averiguar algunas cosas metiendo un palo por el agujero; si el palo se mueve de
cierto modo, sabrás ciertas cosas. Toda esa inteligencia, el equilibrio, la
sabiduría de las edades está en esa habitación, y estás moviendo un palo.
Quiero decirte algo: en esa habitación hay puertas
grandes, que se pueden abrir, y quiero darte los rótulos de las puertas, porque
el rótulo de cada puerta te dirá exactamente por qué no está abierta (seríe).
Vayamos a la puerta llamada preocupación. Intelectualizas
las cosas; te armas una cáscara de preocupación. Al entrar en el cuerpo humano,
el Innato nunca te dará intuición, porque esa cáscara la bloquea. La
preocupación bloquea la intuición. La
preocupación bloquea la intuición.
Vas a otra puerta: se llama ansiedad. Es pariente de
la preocupación. La ansiedad bloquea la intuición. Vas a otra puerta: el
miedo. El miedo bloquea la intuición.
¿Quieres saber cómo los animales nacen en el campo y se
levantan y corren con el rebaño en pocas horas? ¿Quieres saber por qué? ¡Ellos no tienen esas
cosas! Ellos no intelectualizan, no tienen preocupación ni
ansiedad; el miedo que tienen solo se relaciona con la supervivencia. En otras
palabras, si el animal tuviera algún tipo de Innato para sí, - ¡y lo tiene! - ¡está para eso! Y el tuyo está ausente, porque eres tan inteligente. Aprendes
rápido: de qué preocuparte, de qué sentir culpa, y todos los bloqueos que
mantienen ese hermoso cuerpo inteligente interior, el Innato, capturado en una
trampa. Piensa en eso, el Innato está conectado con el Yo Superior, con la
pineal, sabe tanto, tiene todo tu akash, tiene toda la sabiduría, es tú,
es el tú central, está allí, todo ser humano lo tiene, y tienes que estar
metiendo un palo.
Quiero presentar las soluciones para abrir las puertas
que permitirán al Innato contestarte a través de la intuición; aumentar tu
intuición diez veces, para que empieces a entender lo que la intuición te dice,
para que la esperes, estés pendiente, respires mientras te habla, que entiendas
que es un poder, y no una experiencia efímera y te preguntes qué fue lo
que oíste.
Quiero que tomes tu goma de borrar y borres las
etiquetas de las puertas, y quiero que sonrías mientras borras “preocupación”, “ansiedad” y “miedo”. Y de pronto las
puertas ya no tienen rótulos y las sentirás que empiezan a abrirse desde
adentro: el Innato se da cuenta de que ya no hay bloqueos. Y empezarás a estar
en paz; es el ser humano en paz el que tiene la mayor intuición. Es el ser
humano que comprende quién es, de modo que no necesita preocuparse; que
comprende lo que es el Creador en su interior, sea lo que sea que eso
signifique para él. Eres parte del sistema; no eres un accidente. Empiezas a
entender que estás en paz con eso, que incluso sonríes con eso, y aquí viene la
intuición que habías estado pidiendo: gira a la derecha, gira a la izquierda,
haz esto, haz aquello; esto es malo para ti, esto es bueno para ti; esto te
interrumpe. Cambia tu actitud, cambia tu alimentación, cambia tu sendero.
Cambia tu familia (se ríe). Esa es la intuición por la que has orado, la que
todos los seres humanos quieren oir, el cuerpo inteligente que está conectado
con Todo lo que Es; viniste con él.
¿Alguna vez te preguntaste por qué los humanos no
tienen el poder instintivo que tienen los animales? Te acabo de dar la respuesta: demasiado intelecto.
Demasiadas cosas para resolver, para preocuparse, para listar. Debemos haber
dado el ejemplo unas cincuenta veces hasta ahora. Cuando te vas del salón, vas
a tu coche, entras en el coche, enciendes el motor y te vas. Déjame decirte:
esto es un ejemplo de lo que haces con tu propio cuerpo. Entras en tu coche, y
tienes que leer el manual para saber cómo funciona el motor antes de pisar el
acelerador. Quieres intelectualizar cada movimiento de los pistones
involucrados, quieres saber la relación de presión y toda la mecánica de la
transmisión. ¡Y eso es lo que haces
con tu propia vida! Te
intelectualizas a ti mismo a tal grado que el Innato queda atrapado.
El Innato es tu mejor amigo. El Innato quiere ser
parte de esta era nueva. Queridos, los niños van a nacer con un mayor poder
intuitivo, y es por eso que ellos van a desbaratar los sistemas aún más que lo
que lo hacen ahora, porque esa intuición va a crear decisiones más sabias que
cuando estuvieron aquí la vez anterior. Pero el alma antigua puede hacerlo
mientras está aquí. ¿Cuántos de ustedes van
a descartar la caja de creencia que dice que no pueden? Tienen que aferrarse a eso, tienen que analizar esto,
tienen que saber aquello, en lugar de relajarse, tomar una respiración
profunda, y dejar que esas puertas se abran ampliamente.
Eso es lo que viene. Habrá diferentes tasas de éxito;
algunos lo sentirán y entenderán que funciona, y luego no lo hará. Porque
ustedes siguen cerrando las puertas: apareció algo nuevo de qué preocuparse. En
otras palabras, esto es algo que tienen que aprender, es un proceso de paz.
Queridos, esto es información magnífica para una raza
humana en evolución. Es magnífico saber que la próxima vez que vengan no
tendrán que trabajar tan duramente, la intuición estará allí. Pero también está
disponible mientras están aquí. Estas son soluciones para ustedes. Las merecen.
Ya es hora. No es por accidente que están aquí, y va a resolver algunos de los
problemas con que llegaron. Y ese es el mensaje del día.
Que el Innato empiece a ser aquello en que confían más
que en ninguna otra cosa; aquello que está conectado con su corazón, con su
pineal, con su cerebro, de una manera equilibrada que conoce el alma única:
ustedes.
Váyanse de este lugar diferentes de como vinieron: en
amor.
Y así es.
Kryon
Desgrabación
traducción: M. Cristina Cáffaro
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