La visión completa de lo que está ocurriendo con nuestros cuerpos tiene que
ser observada primero a través del lente de lo que está pasando al cuerpo del
planeta Tierra. Y todavía más allá, debemos comprender que todas las cosas
fueron creadas en Unidad con un eslabón de inter-conexión entre las partes de
Dios y los distintos niveles, desde planetarios, hasta sistemas solares,
galaxias y universos.
No podemos considerar la transición cuántica que está ocurriendo en un
planeta, sin tomar en cuenta los efectos y reverberaciones de la creación
completa. Todas las cosas están ligadas, sin importar qué tan distantes
imaginamos nosotros que están las otras dimensiones, o qué tan lejos de
nosotros esté la vida en otros planos de existencia.
Estamos todos conectados por fibras doradas que, visibles o no, nos
conectan con la Fuente Primordial. Durante nuestras visiones, sueños,
meditaciones, o en algún momento de nuestras vidas, todos hemos podido sentir
esta conexión.
Por medio de la respiración consciente podemos darnos cuenta de la red de
vida respirando a través de nosotros y sentir la conexión y la cualidad de esa
unión.
Cada día más y más ciudadanos de la Tierra saben intuitivamente, a pesar de
no poder probarlo, que la Tierra no se mueve sola en un universo, galaxia y
sistema solar sin otra manifestación de vida que la terrestre.
Lo que realmente está ocurriendo es que Luz más elevada, frecuencias más
altas, nuevos códigos de energía, (escoge el nombre que gustes) están entrando
a la Tierra en ondas de ascensión.
Por otra parte, los ciudadanos del planeta, por medio de la energía
enfocada a través de sus meditaciones, plegarias e invocaciones, han estado
asimilando esa Luz y ese Amor y conscientemente y han estado irradiando esas
elevadas energías pasándolas a otras personas y anclándolas en el planeta
mismo. Se trata realmente de una co-creación del hombre que está trayendo el
cielo a la tierra.
El magnetismo está descendiendo simultáneamente en el planeta y en nuestros
cuerpos. Las fuerzas magnéticas son como la goma que pega todas las cosas
juntas. Este descenso en el magnetismo es una señal de que un gran cambio está
ocurriendo.
Los científicos reconocen que la caída del magnetismo en estos tiempos ha
sido rápida, y al mismo ritmo acelerado ocurren los cambios.
Por otro lado, las frecuencias de la Tierra están subiendo y esto también
afecta notablemente los cuerpos de sus habitantes.
Con la caída del magnetismo ocurren cambios a nivel mental y emocional en
un individuo. Es posible que los programas mentales y emocionales que teníamos
grabados comiencen a soltarse. Como la resistencia cae, es más fácil dejar ir.
Es posible que de un momento a otro, ciertas personas, lugares o situaciones ya
no le sirvan a uno, y hay que cambiar, el cuerpo pide hacerlo...
Qué está ocurriendo en nuestros cuerpos?
La humanidad actual de la Tierra camina con vestidos de carne dentro de
cuerpos constituidos por materia-energía. Funcionaban hasta ahora con un
determinado grado de densidad, pero en este momento cierta condensación se está
estableciendo.
Sus vehículos físicos están siendo preparados para ser transmutados en
vestimentas de Luz, mucho más refinadas y menos densas. El karma está siendo
procesado y diluido, habrá menos densidad y menos limitaciones.
Estamos siendo acondicionados para comenzar a interactuar con conciencias
más elevadas. Nuestra biología se abrirá para compartir con otros seres, no
sólo de nuestras especies terrestres, sino con habitantes de otros mundos,
dimensiones o entidades de distintos niveles de existencia..
Lo que realmente nos está sucediendo es lo que los maestros llaman “Transfiguración”.
Nuestra forma condensada ha entrado en un proceso parecido a “derretirse”.
La sustancia de nuestro cuerpo físico, aquel que nos es familiar, está
transformándose en Luz. El cambio consiste en que nuestro cuerpo material y
denso paso a paso se refina y se convierte en “Cuerpo de Luz”.
También, en la medida en que nos vamos conectando con la Mente Divina
Universal, nuestra inteligencia se desarrolla en ciertas áreas de la mente.
Cuando el planeta recibe las frecuencias elevadas de Luz, los habitantes de
la Tierra entran en un proceso de cambio que obra en su organismo a nivel de
los espacios vacíos entre células; bioquímicamente estos están siendo
reubicados.
La fuerza de la Luz activa nuestros cuerpos y literalmente la química de la
mente y cuerpo cambia. Expresado en una forma poética “algo muy antiguo, y sin
embargo nuevo, está saliendo del cascarón”.
La membrana exterior que sujetaba y aislaba a la humanidad está adelgazándose
y los humanos están comenzando a tener la posibilidad de conectarse
conscientemente con dimensiones más altas de Luz.
Estamos siendo preparados, y ya estamos comenzando a pasar de una densidad
molecular a una nueva más alta. Esto es transformación. El siguiente paso en la
escalera Divina para la humanidad es el asumir la forma del Adán y Eva Kadmón
Hasta ahora hemos vivido en un mundo electro-magnético, con una densidad
electromagnética característica que nos ha limitado mucho. Pero estamos siendo
afinados en una frecuencia más alta por la acción de la energía, la acción de
la Flama en la electrificación de la materia de nuestros cuerpos
materia-energía.
¿Por qué es importante?- porque es un paso más alto en nuestro proceso
evolutivo, desarrollado paso a paso para permitir que el Yo Superior o Cuerpo
Crístico se involucre en nuestro desarrollo.
El trabajo que ya se ha hecho ha preparado a algunos seres humanos para
vivir con un tipo más avanzado de resonancia; aquella que está dentro del rango
de capacidades del cuerpo superior.
La Ascensión no consiste en descartar el cuerpo físico, sino de llevarlo
con nosotros un paso más arriba en la escalera de Jacob. A este proceso se le
llama “integrar la Diosa” (el cuerpo físico). Se trata de sentir los cambios, y
de ser conscientes de ellos para apoyarlos.
Un proceso consciente desarrolla en nosotros más sabiduría, porque así
pasamos por la experiencia de tener la vivencia de la Ascensión, o iluminación.
Debe haber una aceptación, el acuerdo de permitirnos sentir lo que tengamos que
sentir para llegar a la comprensión.
No se trata de que despertemos y simplemente la ascensión ya está lista. Es
importante saber esto, porque nos ayudará en el proceso de transformación y
transmutación. Mientras menos resistencia pongamos al cambio, este se dará más
armónicamente.
El maestro Jesús decía que la entrada y la salida eran a través del
corazón. Cuando aprendemos a amar nuestro proceso de ascensión, eliminaremos el
miedo y gozaremos del cambio. El corazón ya conoce el proceso de ascensión, y
el corazón es la puerta al Cristo radiante, nuestro potencial oculto en el ADN.
Las percepciones pueden alterarse
Lo que está ocurriendo es que las dimensiones se están superponiendo unas
sobre otras. Algunas frecuencias de cuarta dimensión están bombardeando
nuestras frecuencias de tercera dimensión, y lo mismo ocurre con frecuencias de
quinta dimensión, y con algunas todavía más altas. Por eso nuestras
percepciones también comienzan a cambiar, pero desde luego cada caso es único.
En general, la humanidad está comenzando a ver y a poder percibir una
multiplicidad de dimensiones y esto causa trastornos en las percepciones
habituales, en una forma u otra. Es como si estuviéramos aprontándonos para
volver a ser lo que en otros tiempos fuimos, o para asumir lo que somos en
dimensiones superiores de evolución.
Algunos circuitos de energía planetaria han sido activados y estos vórtices
planetarios pueden ser ahora percibidos, vistos o sentidos de alguna forma por
muchos individuos. Los cambios son profundos, y continuarán siendo cada vez más
dramáticos. Hay que integrarlos a la vida diaria porque no desaparecerán, la
transformación no es una fase que se pueda cancelar.
El plan Divino está desarrollándose en perfección, trayendo cambios cada
vez más profundos. Este es un nuevo tiempo y una Nueva Era.
Si alguna parte tuya comienza a sentir miedo del cambio es mejor hacerse
consciente de este miedo. Habla a esa parte tuya que vibra en el temor,
controla tus pensamientos y dile a tu mente que el cambio es real, que en eso
consiste el Plan Divino, y que todo está bien para ti.
Es correcto hacer un diálogo con aquellos aspectos de tu personalidad que
puedan sucumbir al miedo. Existe un pensamiento colectivo de la humanidad que
rechaza el cambio. Cuando ocurrió la caída del hombre hubo muchos cambios, pero
no fueron para bien, y hay algo en cada uno de nosotros que lo recuerda.
Desarrolla conscientemente confianza en la apertura de la Nueva Era Dorada
de Paz que se avecina. Mantén viva la visión y el concepto. Háblale a aquella
parte de tu ser que teme el cambio, dile que el cambio es inevitable porque
todo es energía, y la energía, por definición, es constante cambio.
Todos los cuerpos están mutando sus estructuras
En el presente, nuestras formas físicas están recibiendo ondas de Luz muy
poderosas. La luz es absorbida por todas las estructuras, igual si tú crees en
ello o no; las nuevas frecuencias de Luz llegan al planeta y nos afectan a
todos, así no estemos dispuestos o previamente no hayamos pedido recibirlas.
Los efectos causados por este aumento de luz no son solamente físicos.
También a nivel emocional experimentamos cambios dramáticos.
Tenemos un sistema de cuatro cuerpos que están mutando sus estructuras, y
como todos están conectados, si uno cambia se afectan todos. A veces alguien
nos dice algo sin importancia y nos echamos a llorar. Son sentimientos que como
burbujas sacan a la superficie emociones guardadas.
A veces nos sentimos desconectados de Dios, otras veces totalmente
conectados con Dios y los maestros.
Emocionalmente la sensibilidad se ha agudizado, y es probable que vivamos
en la inestabilidad, fluctuando entre los extremos. Por eso se requiere un
trabajo constante de limpieza, de balancear los cuerpos y anclarse.
Lo que está sucediendo afecta la naturaleza del espacio y el tiempo. Afecta
tus relaciones con la energía y con el cuerpo. Hasta los niveles subatómicos de
nuestros cuerpos tienen que alinearse nuevamente con la Luz y esto nos afecta,
podemos sentirlo.
Con los cambios es posible que sientas dolor e incomodidad. Para el sistema
nervioso los cambios son particularmente intensos.
Vamos dejando atrás el espectro planetario al que estábamos acostumbrados y
nos movemos hacia una frecuencia vibratoria más alta, con un nivel de
magnetismo más bajo. Naturalmente nos vamos sintiendo diferentes. Pero no
importa cuál sea tu experiencia, ¡dale la bienvenida al cambio! Estamos
mutando, y en el proceso de mutación cada uno de nosotros estará más cerca de
su propia Divinidad.
Acéptalo, en la medida en que la resistencia cae y la densidad se esfuma,
los programas viejos dejan de funcionar. Pero no hay nada que temer, Dios proveerá.
Estamos recibiendo un nuevo par de anteojos, una nueva conciencia, y un
cuerpo nuevo para vivir en él. El arreglo biológico de la materia está
cambiando.
Estamos siendo afinados a nuevas redes electromagnéticas que están
cambiando nuestros patrones. Nuestra sangre se está tornando más transparente,
porque la hemoglobina está pasando de una densidad molecular a otra. Nuestros
ritmos biológicos están siendo alterados.
Los campos magnéticos del cerebro están trabajando con más Luz, y es a la
fuerza de esa Luz a la que nos estamos ajustando. Estamos siendo afinados y
perfeccionados con un código más elevado de creación.
Esta nueva codificación está literalmente reactivando partes dormidas en
nosotros. Las frecuencias electro-magnéticas que llegan al planeta están
alineando al cuerpo y al cerebro para que podamos adaptarnos a la siguiente
fase del Plan Divino para la humanidad.
Más cambios en el cuerpo físico
La cabeza está aumentando su tamaño. La sangre está cambiando. Las
relaciones de espacios en los niveles subatómicos del cuerpo están siendo
alterados y realineados para que tengan correspondencia con frecuencias
universales y multi-dimensionales.
La velocidad de giro de todas las partículas está cambiando, los campos
magnéticos del cuerpo, de cada chakra y de las células mismas están siendo
realineados.
Es un proceso tal vez incómodo y algunas partes del cuerpo se resienten más
que otras. Es probable que sientas una corriente que recorre tu cuerpo a través
del centro del tubo pránico. Son las ondas de Luz llamadas “columna de
Metatrón". Esta columna de Luz es usada por los maestros para reprogramar
tu cuerpo electro-magnéticamente. Puedes sentir a veces su calor cuando actúa,
un calor que se siente venir desde dentro.
Puede que haya períodos de tiempo en que te sientas muy cansado. Esto es
perfectamente normal. Cuando el arreglo biológico comience para ti, vas a
sentirlo. Piensa que Dios, los maestros y tu presencia Yo soy, están
literalmente transformando tu cuerpo. Están aplicando ingeniería bio-molecular
a los circuitos de tu cerebro.
La luz estará llegando a todos los circuitos del cuerpo para reestructurar
las moléculas y acelerar tus bio-ritmos. Nuevos conocimientos están haciéndose
asequibles a nuestros cerebros. Están ocurriendo también cambios en la piel. Se
trata nada menos que del comienzo de la transmutación biológica de nuestra
forma.
Descripción de los cambios del cuerpo:
Puedes sentir calor que se origina dentro del cuerpo.
Tu sistema nervioso está simultáneamente siendo destruido y re-edificado.
Desde tus huesos emana una corriente de vibración diferente. A veces se
siente dolor dentro de la médula de los huesos en la medida en que está siendo
cambiada la corriente. La estructura del esqueleto va a cambiar más y más,
porque su conformación actual no es capaz de asimilar energías que llegan con
frecuencias cada vez más altas.
Con los cambios se le da la posibilidad de acomodarse a procesarlas. Tendrá
que adaptarse a velocidades de giro más aceleradas. Los huesos del cuerpo son
los fósiles que guardan nuestros recuerdos. Al cambiar los huesos también se da
una sacudida a nuestra historia personal. Por eso es posible que donde más se
sienta el cambio sea en los huesos.
Nuestra realidad, como la hemos conocido, está siendo estirada y cambiada,
y esta es una actividad que, aun cuando no percibimos, cansa el cuerpo. Pero es
Dios obrando en nosotros. Si te sientes fatigado date permiso de descansar, es
tiempo de hacer una siesta.
Puedes a veces sentirte muy fatigado, y esta fatiga puede aparecer
repentinamente. El cuerpo Crístico es la cumbre de la pirámide de nuestros
cuerpos y tiene que integrarse, anclarse y activarse antes de que la nueva
creación se complete.
Dolores de cabeza y desorientación. El dolor se siente con palpitaciones en
la parte de atrás de la cabeza (tallo cerebral?), donde la cabeza se une al
cuello. ¿Podría ser que el circuito Urim (del que se habla en “Las claves de
Enoch) está siendo instalado en el cerebro?. Este es el circuito que conecta
nuestro octavo chakra con el séptimo. Esta conexión habilita nuestra materia
para recibir y luego ser INTELIGENCIA SUPERIOR. ¿Estaremos siendo estimulados
en nuestro centro de memoria, atrás en la cabeza, para recordar nuestras
experiencias en otros niveles del ser? ¿Estamos siendo reconfigurados paso a
paso para poder recibir y decodificar luz, color y sonido en una forma nueva?
¡Yo creo que sí!
Puede haber dolor en todos los cuerpos ( fisico, mental, emocional,
espiritual): A nivel emocional todas las emociones guardadas, los miedos y
negatividades comienzan a surgir para ser limpiados. La ira mostrará su cara y
luego desaparecerá. Estos cambios en los cuatro cuerpos pueden ocurrir muy
rápidamente.
Hay que tener en cuenta que la clave de la trasformación está en el
contacto y conexión que logremos con nuestro cuerpo Crístico.
Están ocurriendo también cambios a nuestros sentidos, especialmente los de
la vista y oído. Cuando los cambios en el oído comienzan puedes sentirte a
veces mareado y el equilibrio puede afectarse. También es posible escuchar un
pitido característico y algo molesto. La vista también se altera, a veces
súbitamente puede haber visión borrosa. Esto causa momentáneamente movimientos
torpes. Todo esto es incómodo, pero recuerda que mucho se está ampliando dentro
de ti.
El velo de la visión interna estuvo corrido por toda una Era, y ahora se
está abriendo para ti.
Estamos en transición, caminando entre mundos, simultáneamente cambiando nuestra
conciencia, nuestros cuerpos y nuestra realidad.
Date tiempo para la práctica de la meditación practicada regularmente. Esto
te pone en contacto contigo mismo y ayuda enormemente en el proceso.
Nuestro cerebro está pasando por cambios inmensos. Muchas de sus funciones
se perdieron cuando ocurrió la caída, y el cuerpo humano se condensó en una
frecuencia más baja. Ahora la glándula pineal está siendo activada y está
creciendo, al igual que la glándula pituitaria. Y ambas están siendo conectadas
a nivel etérico para inducir a estados de conciencia más elevados.
La glándula pineal está recobrando su alineamiento con nuestra naturaleza
divina. Debido a este proceso puede además haber dolor en el centro de la
cabeza. Los espacios Inter.-celulares también perciben dolor cuando son
alcanzados por las nuevas frecuencias de Luz. Está gestándose la
bio-reestructuración de los circuitos que prestan capacidad al cerebro.
Los mensajes de Luz y Amor no son solo pensamientos, son impulsos elevados
que están re-ordenando los sistemas vivientes de Luz del cerebro. La imagen de
Dios está siendo re-definida en nosotros y todo cambia con este nuevo orden.
El cerebro necesita pasar por varios niveles de aceleración para poder
llegar a aceptar el conocimiento evolucionario y comprenderlo. El computador
del cerebro tiene que ser re-estructurado y reconfigurado para adquirir la
posibilidad de comandar nuevas formas de transmisión y creación.
Los dolores intensos
La materia en nosotros está siendo electrificada con el fuego del espíritu
y estamos siendo transformados en una forma física nueva portadora de energías
más refinadas. Pero el dolor que acompaña este proceso puede ser intenso para
algunos de nosotros. Los maestros dicen que este es un precio muy pequeño para
pagar por un regalo trascendental y divino.
Sin embargo, muchos no se sienten listos para soportar la amplitud del
dolor que pueden llegar a experimentar. Necesitamos sentir la intensidad del
dolor para desarrollar compasión incluso por nosotros mismos, para no repetir
más esta danza de densidad nuevamente. Por eso el cambio incluye
irremediablemente algo de dolor. Hay puntos de dolor específicos en el cuerpo
que corresponden a los puntos de coordinación para asimilación de la energía.
La humanidad está pasando por una emergencia fisiológica, y cada uno de
nosotros va a sentir el cambio célula por célula, porque cada célula es un
holograma reflejando a todo el cuerpo. Estamos en el proceso de limpiar y
borrar el contenido de nuestros archivos, esto es: información genética,
patrones kármicos, creencias ancestrales, patrones de pensamiento y
limitaciones del pasado. Pero, nuestras células y nuestro ADN también contienen
la información de la paloma de la paz.
Cuando dejemos ir la codificación anterior nuestra fisiología cambiará. Si
cada célula cambia, nosotros cambiamos. En la medida en que esto ocurre nuestro
cuerpo se va tornando transparente y luminoso.
Puede ocurrir que haya una guerra, confusión o lucha entre células o partes
de nosotros mismos antes de llegar a la aceptación de lo nuevo. Por ejemplo,
probablemente debemos comer menos porque tendremos cada vez menos necesidad de
alimentos, y eso no es fácil de aceptar. Si te encuentras en medio de esa lucha
entre lo que crees y lo que sabes, llama en tu ayuda a la presencia de Dios.
Todo esto es trabajo de integración. Integración de "la Diosa"
(nuestro cuerpo) a niveles celulares.
Es decir, el cielo integrándose a la Tierra. ¡Clama por la vibración de la
verdad en cada célula y míralas como se transforman!. Háblales con respeto,
porque son inteligentes, así trabajarán a tu favor. Cuando una sola célula
cambia, esta transmite impulsos de información que son geometrías
infinitesimales encargadas de cargar con vitalidad a tus otras células o de
transmitirla a otras personas. La cooperación es el secreto para integrar la
Diosa.
Debes estar a cargo de tu propia transformación. Mantener un balance de tus
cuatro cuerpos en este momento es tu tarea más importante.
Descarta el miedo y cuenta con que el cambio será la única realidad que no
puede ser evitada. ¡Dale entonces la bienvenida! Todo lo que necesitamos hacer
es estar abiertos para recibir, y listos para dar cuando así se nos pida.
Hay que observar qué tipo de energía ponemos en nuestros pensamientos y
sentimientos, en nuestras palabras y acciones. Qué tipo de energías ponemos en
lo que cocinamos y comemos. No vamos a lograr dar el salto cuántico de una
transformación cargando el equipaje de nuestros viejos valores.
Ten paciencia con tu proceso de transformación.. No lo controles con un
reloj, ni te compares con nadie. Cada cuál procesa sus propios cambios en
diferentes formas y a distintos ritmos. La gente reacciona en forma diferente
cuando las estructuras de la polaridad comienzan a desvanecerse, y cuando
comienzan a procesar su propio karma. No existe una sola forma ideal, las
posibilidades son múltiples.
Nuestro cuerpo basado en el ciclo del carbón está convirtiéndose en un
cuerpo de Luz con base en el silicio. Algunos trabajadores de luz traen un
contrato, o convenio, para anclar la Luz a la densidad de partes determinadas
de sus cuerpos físicos.
Algunos traen luz a sus corazones, otros a los huesos, otros activan el
funcionamiento del cerebro, y otros más la traen al sistema nervioso. A veces
esto ocurre sin que nos demos cuenta, pero otras veces nos produce incomodidad.
Depende del grado de sensibilidad de cada cuerpo.
En los días por venir cada uno de nosotros será muy diferente, y las
situaciones de nuestras vidas serán muy distintas en la medida en que las
frecuencias se incrementan.
Todos hemos sentido ya como el factor tiempo se ha alterado, y cada vez
transcurre más rápido. El concepto de tiempo está siendo desmantelado.
El corazón de la madre Tierra se acelera en la medida en que sus
frecuencias suben, y todos estamos tratando de seguirle el ritmo. No se trata
de que sientas transcurrir el tiempo más rápidamente porque estás envejeciendo.
Trata de comprender que tú estás aumentando tu frecuencia vibratoria porque
vives en un planeta que está acelerando la suya. Los campos electromagnéticos
que aceleran su giro, a veces pueden incluso producirte mareos.
No juzgar a otros
Hay un mito que tiene gran fuerza dentro del movimiento de “Nueva Era”.
Dice que “Cada uno crea su propia realidad”. Si sientes dolor, tú mismo lo
creaste, o estás resistiendo algo o aferrándote a algún apego. Estas teorías
seguro tienen aplicación en otras circunstancias, pero lo que acá ocurre es
algo completamente diferente.
Nadie conoce de antemano las experiencias que estamos viviendo, así que lo
mejor es no asumir nada, porque puede no ser cierto. Algunos de nosotros
tenemos cuerpos muy sensibles, y son así con algún propósito.
Otros están abriendo caminos evolutivos para un grupo completo o varios
grupos. Otros tienen que vivir el proceso de ascensión conscientemente, con
todos sus detalles, para luego poder ayudar y enseñar a los grupos que vienen
atrás, o para escribir el Libro del Conocimiento del Planeta Ascendente.
Podemos servir a la Luz en una mejor forma cuando aprendemos a no juzgar, a
no explicar las cosas con criterios caducos del pasado, aplicándolos a lo que
está ocurriendo ahora, que es totalmente nuevo. Seamos humildes ...
Por Wistancia Stone
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Re-Publicado
por “Isis Alada”
1 comentario:
Superba♡♡♡
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