Amados hijos.
Ha llegado el
momento de prepararse para los tres días de oscuridad. Por ello, vengo a darles
las instrucciones de lo que deberán hacer. Desde hoy, lunes, 14 de julio de
2014, busquen tener en la dispensa algunos alimentos indispensables, como es el
caso del pan, galletas, verduras cocinadas (en botes de vidrio para que no se
estropeen), y lo que puedan almacenar de agua potable. Busquen tener
a la mano mantas, abrigos, velas/linternas con pilas nuevas, y no dependan para
nada de la electricidad. Como ya he subrayado con anterioridad, no hay nada que
temer.
No salir por
ahí en desesperación alertando a todos, incluso a los escépticos. Ellos
han utilizado su Libre Albedrío y han decidido no despertar en esa vida.
Debemos respetar su decisión. Cuando la oscuridad cubra el planeta, puede que
se sientan muy cansados. Deben ir a la cama, y respetar lo que pide su cuerpo.
Tengan antes el cuidado de cerrar toda la casa, y sobre todo las ventanas y
persianas.
Aunque no va a
pasar-les nada, puesto que estarán todos muy protegidos, no deben abrir su
puerta a nadie durante ese tiempo. Deberán, eso sí, alinearse con
Dios Padre/Madre, conmigo, su Madre María, y con mi amado hijo, Jesús/Sananda.
Estén en estado de recogimiento, en oración/meditación, hasta que el Sol vuelva
a brillar. Todos ustedes estarán siendo guiados y por lo tanto, traten de oír a
su corazón. Estaremos todos conectados al nivel del corazón, y siendo así, si
sienten un impulso de hacer alguna cosa, háganlo.
Mantengan la
calma, y desarrollen la paciencia, mientras dure esa situación. Aprovechen para
elevar su vibración, y perfeccionarse de cara al siguiente proceso que se
culminará pronto: la Ascensión. Y pasados los días de oscuridad, mis hijos, ya
nada será como antes. Una vez transcurridos esos esos días, la Tierra habrá
sido purgada, limpiada, y la oscuridad jamás volverá a prevalecer. En
definitiva, habrá un nuevo amanecer en el planeta y estarán abiertas las
puertas de la nueva Era Dorada sobre la Tierra. Mantengan la tranquilidad,
y denle la bienvenida.
Yo Soy María,
Reina de los Cielos y de la Tierra. Y los amo infinitamente.
Gracias,
Madre… <3 <3
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