Mucha confusión hay con este
término aún, sobre todo se suele confundir dimensión, con densidad. Se podría
definir dimensión como realidades que conviven de forma paralela y densidad es
un estado de vibración y frecuencia de la energía, cuanto menor es la densidad,
menor es la frecuencia de la vibración y por lo tanto más físico, a mayor
vibración menor densidad, por lo tanto más etéreo y sutil. Las densidades a su
vez se dividen en octavas y éstas octavas, en otras y así sucesivamente de
forma fractal, estas octavas pueden ser calificadas como dimensiones, para
explicar las dimensiones, usaré un símil musical. Una nota se subdivide en
octavas según sea sostenido o bemol, o sea, se suba o se baje una octava de esa
nota en concreto, subdividiendo una misma nota en distintos sub-tonos.
Las densidades se componen
básicamente de tres cosas, luz, sonido y color, siete notas, siete colores y
siete tonos de luz, son los que componen el espectro de la creación y estos se
dividen a su vez en octavas como explicaba antes, la unión o suma de cada uno
de ellos, supone una novena densidad que sería el resultado del todo, sería
allí donde habita la Fuente, el origen de la creación, Dios o como quieras
llamarlo. Unido al concepto de densidad en el que la materia se adapta a una
vibración concreta, existe adjunta a cada una de las densidades un espacio
donde la energía (espíritu) desencarnada o desmaterializada, entraría como
lugar de tránsito y descanso, entre encarnaciones, una especie de “cielo” para
que entendamos el concepto, una octava en la densidad, en el que la energía, se
purifica para tornar nuevamente al estado material.
A continuación, voy a explicar brevemente cada una de las densidades, para una mejor comprensión.
A continuación, voy a explicar brevemente cada una de las densidades, para una mejor comprensión.
Primera Densidad: El orbe o planeta, se haya en la vibración más baja, es incapaz de albergar
ninguna forma de vida o conciencia individual, en éste tipo de orbes sólo se
hayan los elementos más básicos, roca, agua, fuego y gases, son los más comunes
y numerosos, para que estos planetas logren una evolución para que comiencen a
albergar vida consciente. Debe haber un equilibrio entre los elementos,
que sumados estos a una correcta radiación de su estrella, logren las
condiciones óptimas. Aquí el estado físico de la conciencia es de tipo mineral,
esta conciencia convivirá en el proceso del planeta a lo largo de las tres
primeras densidades.
Segunda Densidad: Esta es uno de los periodos más largos, aquí el planeta comienza a
incubar las condiciones óptimas para que alberguen conciencias individuales. Se
inicia con vida microscópica o bacteriana, posteriormente albergará plantas y
vida animal, en las últimas fases de esta densidad. La evolución del planeta a
un nuevo cambio de vibración, provocaría que la vida que albergara fuera
cosechada y algunas de estas tomaran conciencia individual, animales, árboles y
en caso excepcional mineral, serían los tipos de vida que serían cosechados, no
sería ni positiva, ni negativa al no existir aún el libre albedrío.
Tercera Densidad: Es la densidad que ocupamos actualmente. Se inician las primeras
conciencias individuales y estas son puestas en evolución a través del libre albedrío,
que puede o no estar, dependiendo de si el Logos o conciencia solar de esa
galaxia, así lo cree. En nuestro caso el libre albedrío está presente, lo que
permite que alberguemos una marcada polaridad y en consecuencia un cambio más
rápido de vibración a través de ésta experiencia. La cosecha puede ser
positiva, negativa o mixta, según las conciencias hayan evolucionado hacia el
servicio a los demás o a uno mismo.
Cuarta Densidad: En esta densidad de vibración más alta, los cuerpos físicos son más
sutiles y no perceptibles por el ojo humano, la polaridad es más relajada, no
requiere una experiencia marcada en ambas polaridades, sino que se elige el
servicio en una de ellas. Esta densidad está marcadamente dividida, entre las
conciencias que son de un carácter marcadamente negativo, que están muy cerca
de la vibración de tercera y ocasionalmente se mezclan, sobre todo cuando el
estado de transición de tercera a cuarta se encuentra en proceso. Las
conciencias de marcado carácter positivo, al contrario, se encuentran más
próximos a las vibraciones más altas de quinta. Aquí los cuerpos físicos
requieren de alimento, pero este no es necesariamente físico, sino más bien
energético, los más regresivos requerirán más energía y por tanto es común que
tengan una marcada tendencia a la parasitación. Las conciencias positivas solo
requerirán de energía pránica o cósmica, En esta densidad la cosecha solo es
positiva, la compasión y el conocimiento son las herramientas para ser elevados
a la siguiente densidad. Aquí se comienzan a formar las almas grupales,
consciencias individuales trabajando bajo un mismo pensamiento.
Quinta Densidad: En este estado vibracional aún se requiere de cuerpo físico aunque éste
es más sutil aún y son de una acentuada luminosidad, las conciencias
individuales tienden a formar grupos de afines, el conocimiento es netamente
compartido, la herramienta para ser elevado de vibración es la sabiduría, el
conocimiento pleno de uno mismo y de los demás seres del cosmos, la polaridad
apenas tiene influencia y no existen formas regresivas. Esta es la densidad
Cristica por excelencia, el canal comunicativo con el Logos es total y la
comprensión de la materia y la Luz como herramienta está en sus primeros
estadios, en los que la creación con estos elementos son usados como
herramienta en la experiencia física. Los seres forman grupos afines cada vez más
numerosos, que engloban planetas enteros o incluso sistemas.
Sexta Densidad: En esta densidad las almas grupales forman conciencias galácticas,
conciencias individuales afines formando a su vez grupos de grupos o
confederación. El cuerpo físico es pura energía, serían lo que las religiones
han llamado ángeles y en espiritualidad seres de luz. En estos estados los
seres, son capaces de manipular la luz, el color y el sonido, para crear
materia. Pueden materializar y desmaterializar orbes completos. Intervienen
activamente en el orden galáctico y de las leyes universales, son maestros y
crean hologramas en los que crear formas de vida en el que desarrollar la
conciencia y manifestar la energía que reciben de la fuente, se encargan de la
correcta experiencia y guía de los seres de densidades inferiores.
Séptima Densidad: En este estado vibracional, los seres empiezan a trabajar la unión
de conciencias grupales, la individualidad es escasa y su tarea es básicamente
la comunicación directa con la fuente, sus cuerpos físicos no tienen forma y
son orbes energéticos, plenamente conscientes, su influencia o trabajo con los
estados vibracionales inferiores son escasos.
Octava Densidad: Esta sería la última densidad física. Esta densidad es un paso previo a
la unión con la Fuente, la materia es prácticamente inexistente y son pura
energía en éste estado. En éste estado de la densidad, somos conciencia en
estado puro, plenamente cohesionadas y listas para la Unión final con el Uno.
Novena Densidad: No sería un estado físico o densidad en sí, sino que en esta mal llamada
novena densidad, se produciría el fin de ciclo espiritual, en el que se
produciría, en último estado de la materia, que es la energía en estado puro en
el infinito proceso de inicio y fin de la experiencia y el conocimiento de la
auto experimentación. Para las almas una vez llegan a este último estadio, es
como un regreso a casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario