El servicio que se le presta a la humanidad no se debe
medir ni determinar, tampoco se ha de escrutar, eso se hace sin contemplarlo,
sin medirse, sin ningún tipo de coto.
Uno se debe dedicar al servicio desmedidamente.
El servicio a los demás es la demostración de la práctica
del amor en su más exaltada expresión.
Sin servicio no hay verdadero sendero, no hay una real
espiritualidad.
Todos tenemos que convertirnos en “Servidores Mundiales” en cada plano, sobre todo en el económico.
La gente necesita dinero, es imposible hacer algo, no
se puede hacer nada, es imposible comprar comida para comer, no hay posibilidad
de movilizarse, comprar medicinas.
Hay que buscar las maneras de suministrarle dinero a
la gente, bien habido, facilitar fuentes de trabajo y de ingresos.
Hay que capacitar a las masas en la forma de que
obtengan dinero de manera honrada, de forma recta, instruirlas de cómo
conseguirlo mentalizándolo y como lograrlo trabajando.
El desvalido enfermo en su casa u hospital, o el recluso
necesitan compañía, ayuda, socorro de un “servidor mundial” que no solamente de
lo que necesita físicamente sino el auxilio espiritual pertinente para ayudarlo
a salir de abajo y lo que sea menester.
Y el más grande de todos los servicios es instruir,
educar a las masas en las Leyes Espirituales, como así también en la existencia
del Alma o el Cristo y la forma de contactarlo y esto se hace favoreciendo la
publicación de libros que suministren esta información, dando charlas,
realizando actividades periódicas que favorezcan esto sin cobrar por este
servicio.
Y aquí es pertinente detenerse.
La mayor obra de servicio tanto público como espiritual es educar.
“Si le regalas un pan a una persona solo comerá
ese día pero si le enseñas a conseguir la harina, amasarlo y hornearlo comerá
toda la vida”.
No es regalar un pan, sino enseñar a amasarlo y
hornearlo.
De esto se trata la labor de servicio más grande que
se pueda realizar en la encarnación.
Hay que hacer campañas gratuitas de educación:
educación escolar, moral, cívica, cultural y sobre todo espiritual y se
necesitan servidores mundiales. Personas que voluntariamente sin el interés de
ningún tipo de remuneración se avoquen a prestar esta asistencia.
En la Metafísica se estimula a diario el
servicio mundial.
Dentro de la Metafísica funciona activamente a diario el “Lord Koot Hoomi Ashrma” ocupándonos de la docencia espiritual a todos los niveles y publicaciones del material de apoyo sea literario, audiovisual o electrónico ; esta la “Hermandad de Asclepios” sanando enfermos; la Hermandad dela Madre Mercedes ocupándose de los reclusos en las cárceles y la “Hermandad de Sanat Kumara” auxiliando ancianos.
Estos son cuerpos de servicio metafísico atendiendo en
áreas de suprema necesidad mundial.
Esto objetivos de Servicio Mundial se deben lograr sin mermar las obligaciones familiares, ni con los amigos, contraídos de antemano.
Dedicarse a alguna de las ramas del servicio mundial
dejando uno o varios hijos abandonados o condenando al abandono una buena
amistad de años no es amor, no es buen crédito espiritual para alguien que dice
buscar o estar con Dios o los Maestros, ese es un farsante, que disfraza de
espiritualidad el desamor. En una persona así no se debe creer su
servicio.
Que valla primero y se ocupe del hijo o los hijos u
amigos que tiene abandonados y luego se dedique a servir para que ese servicio
sea cierto, creíble, pleno.
Para muchos todo esto puede ser demasiada exigencia,
pero es una escogencia como cualquier otra, como dedicarse al esnórquel, el
alpinismo o la informática, que lleva su tiempo, pero no por ello vas a ser mal
padre o amigo con nadie.
Piensa en el Amor.
No se puede dejar de amar ni dejar de manifestar amor
a nadie por amor a algo porque ya todo dejaría de ser Amor.
1 comentario:
muchas gracias es un hermoso blog, le dejo un abrazo lleno de gratitud grande como grande es su corazon
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