LA FUSIÓN CON NUESTRO SER SOLAR
Los ángeles solares, y los Devas, son hermanos de vibración; todos los
seres humanos en otra octava de realidad, somos un ángel solar, tenemos nuestro
propio ser solar, que nos dio la oportunidad de la encarnación presente,
Él es la parte de la energía sutil, que está integrándose en nosotros en este periodo, en nuestra fuerza impulsora, que está detrás de la fuerza de ser conscientes.
También son los creadores de nuestras propias estructuras internas, y de nuestros canales de luz sutil, nadis, meridianos aura y cuerpos sutiles.
Tienes tres cuerpos Solares, que son tu parte espiritual, que no encarnan, que no los afecta la luna, sino el Sol. Tú cuerpo Mental Superior, es el pensador en ti. Recibe diferentes nombres ya que él es tu conciencia Crística - tu Cristo -, tu Maestro Interior, tu Ángel Solar, según las culturas y escuelas metafísicas.
Algo de teoría:
Las enseñanzas de Blavatsky sobre el Ángel Solar, o Manasaputra, recibieron relativamente poca atención, incluso en la Sociedad Teosófica, pero las huellas pueden encontrarse en los escritos de la Sociedad y sus filiales. Geoffrey Hodson describe "el triple Yo Espiritual, llamado por los griegos el Augoeides y al cual frecuentemente se hace referencia como el Ego". 14 Rudolf Steiner analiza el papel del ser angélico que "lleva al individuo de una encarnación a otra". 15
El trabajo de Blavatsky, por supuesto, fue erigido sobre las bases de la filosofía oriental, pero el Ángel Solar tiene su contraparte en la tradición occidental de los misterios. En ésta se le conoce como el Santo Ángel Guardián, el Genio Superior, el Observador Silencioso, o la Gran Persona.
Las referencias al Santo Ángel Guardián se remontan al siglo XIV, pero el
Ángel se discute con más detalle en las obras de los miembros de la Sociedad
Hermética del Golden Dawn (Alba Dorada), contemporánea de los inicios de la
Sociedad Teosófica. Examinar la tradición occidental es importante porque
establece similitudes y contrastes con nuestras propias enseñanzas.
El Ángel Solar también tiene su contraparte en la antigua religión hawaiana de Huna. En la filosofía Huna todos tenemos dos almas, la unihi-pili y la aumakua. El alma superior, el aumakua (literalmente "espíritu de los antepasados") sobrevive a la muerte física para guiar al difunto en su viaje a través del más allá. El término "Antepasados" a menudo hace referencia a encarnaciones anteriores, en lugar del linaje familiar.
Estamos ante el despertar masivo, la gran apertura de la conciencia solar:
La llegada de los Ángeles Solares traería profundos beneficios a largo plazo, pero su efecto a corto plazo fue un duro golpe para la corriente de vida humana naciente; porque todo cuanto vivimos y somos, se desploma al integrar el ángel solar, porque los miedos se desvanecen y se necesita el AUTORESPETO AL CUERPO FISICO Y AL PROPIO SER PARA LA INTEGRACION DEL MISMO.
Por ello, sentimos esa fuerza interior, que casi raya la intolerancia a el abandono de nuestras vidas, por el camino de otros y la apertura de conciencia a la unidad, como prioridad máxima, respeto y coherencia en todo y a todos.
La entrada vibracional es muy fuerte, y es inminente, muchos ya llevamos tiempo integrando, otros en este 2016, lineal para Gaia, será un despertar inmediato, sin los procesos graduales que otros vivieron, es ahora el tiempo de consolidación del ser, y de su integración en nosotros, escuchemos esa voz interna, ahora sí.
“El cuerpo causal es una envoltura que contiene los átomos permanentes astral y físico y la unidad mental.
Es el vehículo más inferior que sobrevive de una encarnación a la
siguiente, y a través de los tres átomos permanentes (por conveniencia tratamos
la unidad mental como tal) sirve para preservar la esencia de las experiencias
de las encarnaciones sucesivas.
Antes del nacimiento físico, la vida fluye desde el cuerpo causal a los
planos mental inferior, astral y físico, activando los átomos permanentes e
impulsando los devas de esos planos a la acción para construir la nueva forma a
encarnar.
Al final de esa encarnación, la vida es retirada de los vehículos
inferiores y los átomos permanentes se enriquecen con lo que se ha aprendido….según
el tratado del fuego cósmico del maestro tibetano”
En el libro del Antakarana de Alice Bailey, nos habla del final de la tarea del ángel solar, en separación del alma , cuando el ser humano decide asumir su propia responsabilidad en la encarnación presente, ahí se puede dar la fusión entre ambos o proceso de Ascensión:
La tarea del Ángel Solar se cumple cuando el alma humana se ha convertido en un eficaz "principio mediador" y ha demostrado su capacidad y voluntad para asumir la responsabilidad de la entidad de la que forma parte.
Demostramos esa capacidad y voluntad trascendiendo los valores del nivel
de la personalidad, comprometiéndonos con el crecimiento espiritual,
respondiendo al propósito divino y por el servicio. En el proceso construimos el
antakarana que sirve como su propio medio de comunicación consciente entre lo
superior y lo inferior.
El alma humana crece a partir de la experiencia acumulada de las encarnaciones. La conciencia del Ángel Solar y la del alma humana se funden en un grado que supera sus diferencias de origen, y en una medida que nosotros, en encarnación, difícilmente podremos comprender. Durante un tiempo, de hecho, son uno.
CADA SER A SU PROPIA VELOCIDAD, PERO TODOS EN UNIDAD, ESTAMOS EN EL MISMO PROCESO, LA FUSION DEL SER FISICO AL SOLAR, O LA INTEGRACION DEL SER SOLAR AL SER FISICO. ESE ES EL RETO ACTUAL, LIBERAR EL CHACRA DEL CORAZON U PUNTO DE ANCLAGE DE NUESTRAS PERSONALIDADES, DEL DOLOR DE LOS SENTIMIENTOS, APRA QUE PUEDA EXPANDIRSE, Y FUNDIRSE EN UNIDAD.
Conversaciones con la hermandad Dorada. Elsa Farrus
https://www.facebook.com/ReikiPracticesAndAscensionalWork?ref=hl
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